Un grupo de aproximadamente 30 personas, encabezado por la madre de Lucas Pereyra y su hermana se manifestaron hoy cortando la avenida Virgen del Valle enfrente al Juzgado de Control de Garantías reclamando Justicia.
En el lugar, trabaja Mariana Pedraza, funcionara judicial, quien en el año 2022 atropelló a Lucas (27) y lo dejó postrado en una cama. En diálogo con la prensa, una familiar de Lucas se mostró impotente al referir cómo es la vida hoy de Lucas: Dejó postrado a un joven de 27 años con una hija de 5. Ella lo tiene que pasear en la silla de ruedas en la plaza, cuando él es quien debe hacer jugar.
A un año de esto, no pasa nada en la causa. El expediente no tiene el informe de alcoholemia de ella, hay muchas irregularidades, señaló la mujer, quien agregó: Nosotros no queremos plata, queremos que Lucas tenga el tratamiento que necesita. Mientras él llora porque no puede tomar un vaso con agua, ella -por Pedraza- sube fotos a su Facebook todos los fines de semana disfrutando de la vida, comiendo asado, en la pileta, tomando. Eso para nosotros como familia es una burla. Luego de permanecer por más de una hora, tiempo en el que el tránsito vehicular en la zona fue cortado por la Policía, los manifestantes se retiraron de manera pacífica.
A lo largo de la manifestación, la funcionaria judicial no salió a dialogar con los manifestantes.