Un hecho conmovedor tuvo lugar en la ciudad de Recreo, departamento La Paz, donde una agente de la Policía de Catamarca logró salvarle la vida a una bebé de apenas ocho días que se había broncoaspirado mientras dormía.
Todo ocurrió cuando, alertados por un llamado telefónico de emergencia, efectivos de la Comisaría recreína se trasladaron de inmediato al B° 1° de Julio, donde una joven madre de 26 años solicitaba desesperadamente ayuda para su hija recién nacida.
Al llegar al domicilio, los uniformados se encontraron con una escena angustiante: la pequeña no podía respirar y su madre, entre lágrimas, explicaba que la bebé se había broncoaspirado minutos antes. Sin dudarlo, la Cabo 1° Carla Charriol, que formaba parte del equipo de respuesta, tomó a la niña en brazos y aplicó la maniobra de Heimlich adaptada para lactantes, con la precisión y el conocimiento que otorga el entrenamiento en primeros auxilios.
En cuestión de segundos, la intervención de la mujer policía permitió desobstruir las vías respiratorias de la bebé, logrando que volviera a respirar con normalidad. "Fue un momento de tensión, pero actué con lo que sabía. Lo importante era que la niña se recuperara", habría expresado luego la policía, según fuentes del destacamento.
Tras estabilizarla, los efectivos trasladaron a la madre y a la bebé en la unidad móvil policial hasta el Hospital Zonal "Dr. Liborio Forte", donde los médicos continuaron con la atención y confirmaron que la niña se encontraba fuera de peligro.
El hecho fue informado a la Fiscalía de la Sexta Circunscripción Judicial, que tomó conocimiento formal de lo sucedido. Si bien no se instruyó una causa penal —dado que se trató de un accidente doméstico—, desde la fuerza policial destacaron la actuación ejemplar de la agente.
Fuentes del área de Seguridad indicaron que la rápida reacción y capacitación del personal resultaron determinantes para evitar una tragedia. "Este tipo de intervenciones reflejan la importancia de la formación constante en primeros auxilios y el compromiso de nuestros efectivos con la comunidad", expresaron.
La acción de Charriol generó una ola de reconocimiento entre sus compañeros y en la comunidad recreína.
El hecho, que podría haberse convertido en una tragedia, terminó con un final esperanzador gracias a la valentía, la empatía y la preparación profesional de una mujer policía que no dudó en actuar cuando cada segundo contaba.