En la mañana de ayer, en ámbitos del Tribunal Penal juvenil, se desarrolló la audiencia de control de detención al adolescente de 17 años que el pasado domingo fue detenido por la policía, tras ser encontrado en su cama durmiendo, luego de apuñalar, en reiteradas oportunidades, a una vecina de apellido Narváez, quien permanece internada en la sala de terapia intensiva del hospital San Juan Bautista.

La audiencia, que inició poco después de las 10:00 de la mañana, fue presidida por el juez de control de garantías penal juvenil, Rodrigo Morabito. Además, fueron partes el fiscal del fuero especial, Dr. Guillermo Narváez, el defensor oficial penal juvenil, Dr. Daniel Véliz, y la Asesora de Menpres.

Sentado ante el estrado, el adolescente escuchó el alegato del fiscal, quien, al concluir, solicitó al juez que el adolescente, quien debe responder por los supuestos delitos de robo agravado por el uso de arma y homicidio criminis causa en grado de tentativa, en concurso real, continúe detenido en el Centro Juvenil Santa Rosa.

En sus fundamentos, el fiscal hizo un relato pormenorizado del hecho, en el que dejó en claro el accionar cruel y malicioso del jovencito, que, si bien no cuenta con antecedentes computables, "no existe en el fuero penal juvenil un hecho de tremenda envergadura con tanta crueldad para con la víctima protagonizado por una menor de edad", refirió.

Asimismo, Narváez hizo mención a que la víctima no fue elegida al azar y, sobre la misma víctima, dijo que "con el imputado y su familia fue complaciente y generosa".

Al referirse al hecho, recordó que el adolescente "no dudó en entrar a la casa con sus capacidades plenas, elegido el lugar, a la víctima y la modalidad de la ejecución, portando un cuchillo o cuchilla de grandes dimensiones, con una hoja de 15 cm. de longitud. 

Siguió, "escaló una tapia, preparó el escenario de ingreso. Se despojo de las zapatillas para no alertar a la moradora que estaba durmiendo; entró por la ventana al dormitorio y la sorprendió, la atacó ferozmente, cruelmente, resaltó, asestándole cantidades de puñaladas en zonas vitales, ante la clemencia del pedido de cese a la agresión por parte de la víctima, mientras le exigía plata".

Luego la dejó y "cuando iba a retirarse por donde había ingresado vio que la víctima estaba con vida, ingreso nuevamente a la habitación para seguir asestándole más puñaladas, que milagrosamente no le ocasionaron la muerte".

Además, agregó el fiscal, como víctima y victimario son vecinos y no existe posibilidad alguna de ser en un futuro juzgado en un debate oral y público y declarado culpable, recibiendo una pena excarcelable, "se justificaban los extremos legales pertinentes para que sea confirmada la detención al adolescente" .

Luego, se escuchó al defensor oficial, quien si bien reconoció que el hecho fue de extrema gravedad y la víctima debe recibir una respuesta, el autor es menor de edad, sin antecedentes y, por ende, debe ser tratado como tal.
"No coincido con el fiscal de que exista un peligro de fuga y, si bien son vecinos, pedimos que continúe detenido, pero bajo la modalidad de detención domiciliaria en la casa de un familiar y con pulsera electrónica".

Finalmente, hizo uso de la palabra la asesora de menores, quien se adhirió a los dichos del defensor, resaltando que el autor es menor de edad, por lo que sus derechos deben prevalecer por su condición ante la pugna con otro derecho, como el de la víctima en este caso.

Cuarto intermedio

Luego de un breve cuarto intermedio, la audiencia se reanudó y el juez dio a conocer el veredicto. En coincidencia a lo peticionado por el fiscal, el adolescente continuará detenido en el Centro Juvenil Santa Rosa.

Ahora el fiscal cuenta con diez días para solicitar o no la prisión preventiva, es decir, para que el chico espere detenido el juicio en su contra.