Argentina acelera negociaciones en el Mercosur para lograr una baja de aranceles y acercarse a EE.UU.
En medio de un complejo escenario, el canciller argentino Gerardo Werthein busca apoyo de Brasil y socios del Mercosur para ampliar la lista de productos exceptuados del Arancel Externo Común y avanzar en un acuerdo comercial clave con Estados Unidos. La decisión marca un giro estratégico en la política exterior del país.

En medio de un complejo escenario geopolítico y comercial, Argentina intensifica sus esfuerzos diplomáticos dentro del Mercosur con el objetivo de ampliar la lista de excepciones al Arancel Externo Común (AEC). Esta maniobra apunta directamente a facilitar una futura flexibilización arancelaria con Estados Unidos, luego del nuevo esquema tarifario anunciado por la administración de Donald Trump.

Con casi 100 productos actualmente exceptuados del arancel regional, la Argentina busca sumar al menos 50 nuevos códigos arancelarios estratégicos, con el aval de sus socios del bloque. Este avance es fundamental para cumplir con una de las condiciones impuestas por Estados Unidos en el marco de una posible negociación bilateral.

El rol clave de Brasil en la estrategia argentina

La reunión de cancilleres del Mercosur, liderada por el canciller argentino Gerardo Werthein en el Palacio San Martín, es un punto de inflexión para consolidar una estrategia común. Sin embargo, el respaldo de Brasil es visto como el factor determinante. Aunque Paraguay y Uruguay ya manifestaron cierto apoyo a la iniciativa, el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva mantiene una postura cautelosa.

Brasil ha iniciado una evaluación técnica minuciosa a través de sus distintos ministerios para determinar el impacto que tendría una "liberalización" arancelaria sobre su economía. Este proceso, aún en curso, retrasa la toma de una decisión definitiva, pero refleja el peso institucional de los análisis técnicos dentro de la política exterior brasileña.

Una política exterior argentina con nuevo enfoque

La actual administración argentina ha adoptado una orientación más alineada con los intereses de Estados Unidos, marcando un giro frente a la postura tradicional del Mercosur. La reciente visita del jefe del Comando Sur, Alvin Holsey, y el viaje del presidente Javier Milei a Paraguay para reunirse con Santiago Peña, refuerzan esta línea de acción. Ambos gestos son interpretados como señales claras de una nueva estrategia regional basada en mayor apertura y cooperación bilateral.

La Cancillería argentina, aunque reservada en sus declaraciones, se muestra optimista sobre la posibilidad de cerrar esta semana los puntos pendientes para ampliar la lista de productos exceptuados. Este paso es crucial para proteger sectores industriales locales frente a la competencia de productos importados, en especial aquellos originarios de Estados Unidos.

Mercosur: modernización y nuevos desafíos

El debate sobre los aranceles tiene lugar en la antesala de la cumbre del Mercosur que se celebrará en Buenos Aires en julio. Se espera que durante este encuentro se anuncie oficialmente la ampliación de las excepciones al AEC y se plantee una posible modernización del bloque regional. Este ha sido un reclamo persistente por parte de todos los países miembros que buscan dotar al Mercosur de mayor dinamismo y flexibilidad frente a los desafíos del comercio internacional.