El Grupo Dass, uno de los principales actores de la industria del calzado en Argentina, anunció el cierre definitivo de su fábrica ubicada en Coronel Suárez, provincia de Buenos Aires. La medida, que se hará efectiva el próximo 20 de enero, afectará a 360 operarios que ya han recibido notificación de despido.
"Esta decisión responde a un plan estratégico diseñado para optimizar procesos y fortalecer su posición en el mercado, garantizando una gestión de excelencia. La medida se enmarca en la necesidad de adaptar las operaciones a la nueva dinámica del mercado en Argentina, que plantea un cambio de ciclo económico en el país caracterizado por nuevas condiciones comerciales", aseguraron a través de un comunicado.
360 operarios despedidos
Según informó el Grupo Dass, la producción se centralizará en su planta de Eldorado, Misiones, donde se fabricarán productos de marcas como Adidas, Asics, Umbro, Fila y Nike. La consolidación responde a un análisis exhaustivo de factores como logística, eficiencia operativa y estructura de personal. Este movimiento tiene como objetivo mejorar la competitividad y garantizar la sostenibilidad de la operación, según aseguró la empresa.
La compañía explicó que este cambio también está impulsado por ajustes en las estrategias de las marcas asociadas, que buscan maximizar beneficios para los consumidores. Entre los factores que influenciaron esta decisión se encuentran la mayor importación de productos y un contexto económico desafiante que afecta la modalidad de fabricación local.
Sin embargo, el cierre de la fábrica genera un fuerte impacto en la economía de la comunidad con alrededor de 360 operarios despedidos. Al respecto, la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado (Uticra), y su titular Agustín Amicone, calificó la medida como "injustificada" y destacó que el sector está operando con buenos niveles de actividad, incluso con horas extra en algunos casos. Además, solicitó la intervención del gobernador Axel Kicillof para abordar la situación.
La fábrica de Coronel Suárez representaba una fuente clave de empleo en la región, y su cierre impactará tanto a las familias de los trabajadores como a la economía local. Este movimiento también pone de relieve los desafíos que enfrenta la industria del calzado en un contexto de cambios económicos y comerciales en Argentina.
Dass no lo dice directamente, pero se desprende que en parte el cierre se produjo por una mayor importación de productos de parte de las marcas, lo que generó ese cambio de estrategia y también el ajuste en la modalidad de fabricación local. Otra alternativa podría ser la caída de consumo para el sector, pero el propio gremio aseguró que no es ese el contexto actual.
"Se anunció el cierre definitivo y nos parece injustificado, sobre todo porque la gente estaba de vacaciones. Más allá de las dificultades económicas generales, el sector está bien y no hay mayores problemas en nuestro sector, que trabaja bien e, incluso, en algunos casos con horas extra. Rechazamos los despidos y le pedimos intervención del gobernador Kicillof atento a la gravedad del cierre definitivo de la planta", dijo Amicone.
Factores que influyen en la decisión
El Grupo Dass ya había enfrentado dificultades en el pasado. En agosto de 2022, despidieron a 100 operarios en su planta de Misiones debido a la imposibilidad de importar insumos, una situación agravada por las restricciones impuestas por el Banco Central. Estas limitaciones afectaron a las empresas que apostaron por el crecimiento de la producción nacional, obligándolas a reestructurarse para mantenerse operativas.
Por otro lado, la mayor importación de calzado por parte de las marcas asociadas al grupo también generó un cambio en la demanda local, influyendo en los volúmenes de producción y en la capacidad del Grupo Dass para mantener activa su operación en Coronel Suárez.
Un jugador clave en la región
Desde su ingreso al mercado en 2008, el Grupo Dass ha fabricado calzado para marcas internacionales como Adidas, Nike, Fila, Umbro y Asics. Además, es titular de licencias clave, como la de Fila para toda Latinoamérica y la de Umbro para Argentina, Brasil y Paraguay. Su presencia en la región incluye operaciones propias en Argentina, Brasil y Perú, así como distribuidores en otros países de América Latina.
El cierre de la fábrica en Coronel Suárez subraya los desafíos que enfrenta la industria del calzado en Argentina, desde restricciones a las importaciones hasta cambios en las estrategias comerciales de las marcas. Aunque el Grupo Dass busca adaptarse a las nuevas condiciones del mercado consolidando su producción, el impacto en los trabajadores y en la comunidad local plantea interrogantes sobre la sostenibilidad de estas medidas.