El día posterior a la primera vuelta presidencial en Chile, el Gobierno argentino confirmó que no emitirá una postura institucional sobre el balotaje entre José Antonio Kast, del Partido Republicano, y Jeannette Jara, candidata del Partido Comunista. Aunque se evitará un pronunciamiento formal, en la Casa Rosada reconocen que un triunfo del dirigente conservador sería beneficioso para fortalecer una articulación de derecha en la región, una expectativa que también observan referentes catamarqueños alineados al oficialismo nacional.
Pese a que distintos funcionarios libertarios compartieron felicitaciones informales en redes sociales —incluyendo publicaciones del presidente Javier Milei—, fuentes de Balcarce 50 aseguraron que la administración no intervendrá de manera pública en el proceso electoral chileno. "Es evidente que preferimos que gane el candidato conservador antes que la candidata comunista, pero no queremos inmiscuirnos en la elección", señalaron desde el entorno presidencial.
En ese marco, no descartan un contacto informal entre Milei y Kast, aunque no existe por ahora una comunicación programada. Ambos dirigentes mantienen una buena relación, desde su primer encuentro en el evento Europa Viva 2024, organizado por Vox en Madrid.
Tras los resultados del domingo —26,58% para Jara y 24,32% para Kast—, en el Gobierno argentino anticipan una segunda vuelta favorable al referente de la "nueva derecha" chilena. En su análisis, el candidato podría captar los votos sumados de Evelyn Matthei y Johannes Kaiser (27%), además de atraer parte del electorado de Franco Parisi, quien obtuvo un significativo 19,80%.
Para la administración libertaria, un eventual triunfo de Kast se alinearía con la estrategia regional que impulsan Milei y Donald Trump para limitar la influencia del populismo en América Latina y promover nuevas administraciones de derecha. Aunque Kaiser es quien más se asemeja al perfil del mandatario argentino, Kast genera mayor aceptación en el Gobierno por sus discursos contra la inmigración irregular y su promesa de aplicar un fuerte ajuste fiscal.
En paralelo, Milei celebra el avance de la oposición chilena ante la posible derrota de Gabriel Boric, así como el cambio político en Bolivia tras la victoria de Rodrigo Paz y su sintonía creciente con el presidente paraguayo Santiago Peña. En la Casa Rosada analizan que, si Kast gana el 14 de diciembre, Milei podría convertirse en "un líder natural" de una nueva articulación ideológica en la región, aunque sin formalizar una estructura institucional.
Las señales públicas ya comenzaron a aparecer. El ministro de Economía, Luis Caputo, felicitó al candidato conservador y le expresó su apoyo de cara al balotaje. También lo hizo el secretario de Culto y Civilización, Nahuel Sotelo, quien habló de una "región que comienza a seguir el camino iniciado por Milei". Ambos recibieron el retuit del mandatario, que también compartió un mensaje de la diputada Juliana Santillán, quien celebró el avance electoral del referente chileno.
Mientras tanto, Milei evalúa su participación en la cumbre del Mercosur del 20 de diciembre en Foz de Iguazú. En su entorno advierten que el bloque regional requiere cambios profundos y creen que una eventual suma de nuevos gobiernos de derecha podría limitar la influencia del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, quien ocupa la presidencia pro tempore del Mercosur.