El gobierno ha puesto su foco en la industria cultural. Tras los comentarios del actor Guillermo Francella sobre el éxito de taquilla y los subsidios, el debate sobre el financiamiento del arte se ha intensificado. Ahora, el oficialismo ha arremetido contra la actriz Marina Bellati a través de las redes sociales.
Todo comenzó con las declaraciones de Bellati en un programa de televisión, donde afirmó que era "dañino" someter el arte a las leyes del mercado. Rápidamente, el vocero presidencial, Manuel Adorni, y su segundo, Javier Lanari, salieron al cruce.
Lanari, en su cuenta de X (antes Twitter), retuiteó un mensaje de Adorni y añadió una dura crítica: "Cuando un artista llora subsidio deja de ser un artista. Pasa a ser un empleado público. Y, si además hace política con ese subsidio, es un militante rentado...". Estas publicaciones fueron replicadas por el presidente Javier Milei, lo que elevó aún más el tono de la confrontación.
La polémica se enmarca en un contexto de cierre de listas y campaña electoral para las elecciones nacionales y bonaerenses. El cruce con la actriz se suma a la controversia generada por Francella durante la promoción de su película, donde el actor respaldó la idea de que las producciones deben ser rentables en la taquilla.