El Gobierno pide suspender el paro de residentes en el Garrahan mientras crece la tensión por los salarios
En medio de un fuerte conflicto salarial, el Ministerio de Salud pidió a los médicos residentes del Hospital Garrahan que suspendan su paro por 48 horas con el fin de avanzar en un acuerdo. Mientras el Gobierno apunta a la "ineficiencia" del plantel administrativo, los profesionales denuncian sueldos bajos, renuncias masivas y falta de reconocimiento al rol clave del personal asistencial.

En medio de un conflicto salarial que expone la delicada situación del sistema de salud pública en Argentina, el Gobierno nacional solicitó a los médicos residentes del Hospital Garrahan que suspendan su paro por 48 horas. La propuesta, impulsada por la ministra de Salud, Cecilia Loccisano, busca generar un espacio de diálogo para concretar una mejora salarial.

Loccisano confirmó que se realizaron dos reuniones recientes con representantes de los residentes, quienes habían presentado una nota formal pidiendo una audiencia. "Necesitamos que se sienten con nosotros para cerrar una propuesta", sostuvo la funcionaria en declaraciones a Radio Mitre.

El Garrahan bajo presión: críticas a la "ineficiencia" administrativa y reclamos por condiciones laborales

La ministra adjunta aseguró que existe voluntad política para otorgar aumentos, pero cuestionó la gestión de recursos dentro del hospital, apuntando directamente contra el exceso de personal administrativo y operativo. Según la funcionaria, la planta de 953 empleados no médicos es excesiva frente a los cerca de 480 médicos, y consideró que la administración hospitalaria durante el gobierno anterior promovió un crecimiento desmedido sin mejoras en las prestaciones.

"Durante el gobierno de Alberto Fernández, se incrementó el personal en más de 1200 empleados. Hoy todo ese personal sigue y las prestaciones del hospital son las mismas. De esas personas, 300 son administrativos", argumentó.

Datos oficiales y contrapunto sindical: ¿dónde están realmente los recursos?

Un informe elaborado por trabajadores del Garrahan arroja otros números:

  • Logística: 957 empleados (incluye 473 administrativos)
  • Conducción: 581
  • Asistencial: 3.190 (de los cuales 558 son médicos, el resto técnicos y auxiliares)

Alejandro Lipcovich, secretario general de la Junta Interna de ATE, defendió la estructura del hospital y aclaró que muchos médicos figuran como parte del área de conducción, aunque realizan funciones asistenciales. También recordó que hay alrededor de 700 residentes y becarios que no están reflejados en el informe oficial, la mayoría profesionales médicos que sostienen la atención diaria.

La voz de los profesionales: renuncias, bajos salarios y pacientes en riesgo

La doctora Cristina Alonso, jefa de Laboratorios, expresó su preocupación por el éxodo de médicos y la precarización laboral. "Sin los residentes no hay hospital. No puede ser que estén cobrando la miseria que están cobrando", denunció, revelando que un médico residente de primer año cobra alrededor de $800.000, cifra considerada insuficiente frente al costo de vida actual.

Alonso también advirtió sobre las graves consecuencias del conflicto en la atención de pacientes vulnerables: "Los chicos que están en quimioterapia no pueden estar sin ir. Todo el diagnóstico de enfermedades raras que se hacen en el hospital, es ignorancia pensar que el Hospital Garrahan es evitable".

Un hospital clave bajo tensión: alta demanda y escasos recursos

El Hospital Garrahan es un referente nacional e internacional en pediatría, con cerca de 600.000 consultas ambulatorias al año, 100 trasplantes y unas 10.000 cirugías anuales. Su relevancia en el sistema de salud pública es indiscutible. Sin embargo, su financiamiento, ahora principalmente a cargo del Estado nacional desde 2017, se enfrenta a crecientes tensiones presupuestarias.

Los trabajadores exigen una recomposición salarial del 100%, y que ningún sueldo quede por debajo de la canasta básica. Mientras tanto, el pedido del Gobierno de suspender la medida de fuerza pone en pausa, pero no resuelve, una disputa que refleja las profundas contradicciones del sistema de salud argentino.

Un negociación urgente para evitar el colapso de un hospital emblemático

La crisis en el Hospital Garrahan representa mucho más que una disputa laboral. Es el reflejo de una política sanitaria que debe redefinir prioridades para no colapsar ante la demanda social y la pérdida de recursos humanos clave. La suspensión del paro por 48 horas podría abrir una ventana de negociación, pero sin una respuesta concreta a las demandas salariales y estructurales, el conflicto podría escalar.