El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se refirió este domingo a la creciente tensión entre el presidente Javier Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel, y consideró que una posible salida al conflicto dependerá de una actitud "más solidaria" por parte de la titular del Senado hacia las decisiones del Poder Ejecutivo.
"Si se puede modificar esta situación de tensión, depende de que la vicepresidenta se muestre más solidaria", afirmó el funcionario en declaraciones radiales. No obstante, aclaró que "siempre hay posibilidades para un encuentro" entre ambas figuras del oficialismo.
Desde el entorno presidencial apuntan directamente a Villarruel por el distanciamiento con el mandatario, a quien no ve desde hace semanas. La relación se resquebrajó, entre otros motivos, tras la sesión del Senado del pasado 8 de julio, cuando la vicepresidenta permitió el tratamiento de un paquete de proyectos impulsados por la oposición, incluidos un aumento para las jubilaciones y la declaración de la emergencia en discapacidad. Esa acción fue considerada por Milei como una "traición".
Si bien Francos intentó matizar esa acusación, admitió que el presidente "siente como una defraudación" la actitud de Villarruel. "En esa famosa sesión, tanto el Presidente como la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, entendían que no se debía habilitar el debate", explicó.
Las críticas hacia la vicepresidenta se multiplicaron desde sectores del Gobierno y en redes sociales. Villarruel, por su parte, respondió con dureza. En un mensaje publicado en su cuenta de Instagram, defendió su accionar: "Si hay equilibrio en la política económica, asistir a los más desprotegidos no debiera ser tan terrible. El tema es que un jubilado no puede esperar y una discapacitada, menos. Que ahorre en viajes y en la SIDE y listo", sostuvo.
Además, volvió a cargar contra Milei: "Cuando el presidente decida hablar y comportarse adultamente, podré saber cuáles son sus políticas, dado que no habla".
Francos también analizó los orígenes de la disputa. Señaló que Villarruel podría haberse sentido desplazada por no haber sido tenida en cuenta para coordinar áreas de su interés. "Durante la campaña, el Presidente le había encargado el tema de seguridad y Fuerzas Armadas. Pero luego, por circunstancias políticas, debió hacer un acuerdo con la candidata del PRO, Patricia Bullrich, y con Luis Petri", argumentó.
La tensión interna se suma a las dificultades del oficialismo para avanzar con su agenda legislativa. La derrota en el Senado y el fracaso de las negociaciones con los gobernadores expusieron las debilidades del esquema de poder de La Libertad Avanza. Las disputas internas por espacios de decisión podrían seguir condicionando la gobernabilidad en un escenario cada vez más fragmentado.