La Iglesia reclama al Senado aprobar la ley contra la ludopatía antes de fin de año
A través de una carta dirigida a Victoria Villarruel, la Conferencia Episcopal Argentina pidió el urgente tratamiento del proyecto de prevención de la ludopatía, advirtiendo sobre el impacto de las apuestas en línea en niños y jóvenes. Los obispos alertaron que el fenómeno "es un atentado contra la vida" y exigieron una respuesta estatal inmediata.

La Conferencia Episcopal Argentina (CEA) pidió al Senado de la Nación que avance con el tratamiento del proyecto de ley de prevención de la ludopatía, aprobado en Diputados en noviembre de 2024, y que podría perder estado parlamentario si no se trata antes del 20 de noviembre. En una carta dirigida a la vicepresidenta y titular del cuerpo, Victoria Villarruel, los obispos advirtieron sobre el crecimiento alarmante de las apuestas en línea y su impacto en niños, adolescentes y jóvenes.

"La ludopatía es un atentado contra la vida. Urge el tratamiento del proyecto de ley que tiene media sanción de Diputados", expresaron los integrantes de la Comisión Ejecutiva del Episcopado, encabezada por el arzobispo de Mendoza, Marcelo Colombo; el cardenal de Córdoba, Ángel Sixto Rossi; el obispo de Jujuy, César Daniel Fernández; y el obispo auxiliar de San Isidro y secretario general de la CEA, Raúl Pizarro.

En la misiva, los prelados remarcaron que la falta de regulaciones ha permitido que "cada celular se convierta en un casino", lo que expone a los menores a una problemática que no distingue clases sociales ni regiones. "Hay muchos motivos que nos llevan a preocuparnos, porque estamos viendo el daño social que ocasiona", sostuvieron.

El texto, de tono urgente, también subraya que la aprobación de la ley representa un paso necesario para proteger a los más vulnerables y fortalecer la defensa del bien común. "El Estado no puede demorarse en su respuesta, porque los daños serán cada vez más profundos y difíciles de revertir", insistieron los obispos.

La carta cita además las palabras del sacerdote cordobés Munir Bracco, quien afirmó: "La apuesta deportiva es todo lo contrario a lo que propone el deporte. Apostar no es jugar. Jugar es otra cosa".

La Iglesia argentina viene abordando el fenómeno de las adicciones a través de tres grandes líneas pastorales. La primera es la Pastoral de Adicciones, que busca proteger a jóvenes y niños frente a nuevas formas de dependencia. En este marco, se firmaron convenios con el Ministerio de Educación para capacitar docentes y trabajar el tema en las aulas.

El segundo eje es la Pastoral Social, desde donde se impulsa una mesa de diálogo con dirigentes políticos, sindicales y movimientos sociales para diseñar estrategias comunes. "El deporte cumple un rol social clave, sobre todo en los sectores más vulnerables, pero las apuestas se concentran en los clubes de elite", advirtieron.

Finalmente, la Acción Católica Argentina trabaja en la elaboración de planes de prevención y charlas sobre bullying y suicidio juvenil, temas que, según la Iglesia, se relacionan con el aumento de las adicciones digitales y la exposición temprana a los juegos de azar.

Con este pronunciamiento, la CEA se suma a las voces que reclaman una regulación urgente del juego online, en un contexto en el que las aplicaciones y plataformas de apuestas crecen sin control y captan cada vez más a menores de edad.