Milei y Kicillof miden fuerzas en unas legislativas marcadas por la preocupación por el ausentismo
Este domingo se votan senadores y diputados provinciales en las ocho secciones electorales bonaerenses. La Libertad Avanza apuesta a polarizar con el peronismo, mientras que el oficialismo provincial confía en la tracción de los intendentes. El fantasma de la baja participación atraviesa a todos los espacios.

Este domingo, más de 14 millones de bonaerenses estarán habilitados para elegir 46 diputados y 23 senadores provinciales, además de concejales en los 135 municipios. Será la primera vez que la provincia desdoble sus elecciones legislativas de las nacionales, lo que convierte a la jornada en un termómetro político a poco más de un mes de las elecciones generales del 26 de octubre.

LLA busca nacionalizar la campaña

La estrategia de La Libertad Avanza fue clara desde el inicio: instalar la elección bajo la consigna "kirchnerismo o libertad". Javier Milei acompañó esa narrativa en actos y caravanas, en lo que será su primer test electoral tras el escándalo por la filtración de audios que involucraron a su entorno.

En la Casa Rosada ven esta elección como una prueba previa, pero con valor político simbólico. El gran objetivo, remarcan, está en octubre, cuando se pongan en juego bancas en el Congreso Nacional.

El desafío del peronismo bonaerense

Por su parte, el gobernador Axel Kicillof enfrenta el reto de renovar la confianza en su gestión y, a la vez, mantener la unidad del peronismo provincial. El armado de listas estuvo signado por tensiones internas, aunque en la recta final intentó mostrar cohesión junto al Frente Renovador.

La campaña oficialista se apoyó en la territorialidad de los intendentes, con cierres seccionales que contrastaron con el gran acto libertario en Moreno. La premisa: marcar la diferencia con un modelo de "Estado presente" frente a la acusación libertaria de "ausentismo".

El factor que preocupa a todos: el ausentismo

Uno de los grandes interrogantes de la jornada es el nivel de participación electoral. En provincias que ya votaron este año, la asistencia osciló entre el 46% y el 65%, muy por debajo de la media histórica del 77% en elecciones de medio término.

Tanto Milei como Kicillof advierten que la apatía y el desdoblamiento de los comicios pueden afectar la concurrencia. Ante ese escenario, en el conurbano se desplegó un operativo contrarreloj: punteros, remises y recorridas puerta a puerta buscan garantizar mayor asistencia a las urnas.

El escenario de tercera fuerza

Aunque la pelea principal está entre libertarios y peronistas, el espacio Somos Buenos Aires —integrado por la UCR, Hacemos por Nuestro País, la Coalición Cívica, GEN y partidos vecinales— aspira a consolidarse como tercera opción, aunque sin chances de disputar el liderazgo.

Resultados y expectativas

Los primeros resultados oficiales se esperan después de las 21 horas. En la Casa Rosada anticipan que el resultado será tomado como una señal, pero no como definitorio. Para el peronismo bonaerense, en cambio, se trata de un examen crucial que pondrá a prueba su capacidad de retener su principal bastión político.