El presidente Javier Milei partirá esta noche rumbo a Oslo, capital de Noruega, para participar de la ceremonia de entrega del Premio Nobel de la Paz a la dirigente opositora venezolana María Corina Machado, considerada la principal referente de la lucha por los derechos humanos en su país y la figura más relevante de la oposición al régimen de Nicolás Maduro.
La presencia del mandatario argentino en el acto, previsto para el próximo 10 de diciembre, no será solo protocolar. La decisión de asistir al evento ratifica su posicionamiento geopolítico abiertamente crítico del chavismo y alineado con la estrategia de Estados Unidos, que en las últimas semanas intensificó su ofensiva diplomática y militar contra el gobierno venezolano.
Según confirmaron fuentes oficiales, Milei viajará en un vuelo especial acompañado únicamente por su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei. La comitiva arribará a Noruega el martes, y el Presidente contará con algunas horas libres antes del acto central, que se realizará el miércoles en el Centro Nobel de la Paz, ubicado en el corazón de Oslo.
La ceremonia contará con la presencia de varios jefes de Estado latinoamericanos. Están confirmados el presidente de Ecuador, Daniel Noboa; el mandatario de Paraguay, Santiago Peña; el presidente de Panamá, José Raúl Mulino Quintero, y Edmundo González Urrutia, a quien la oposición considera el presidente legítimo de Venezuela tras haber ganado las últimas elecciones, aunque no pudo asumir debido al fraude denunciado contra el régimen de Maduro.
También asistirán referentes de la resistencia venezolana en el exterior, entre ellos la abogada Adriana Flores Márquez, directora de la organización Comando Venezuela en la Argentina y ex jefa de campaña de María Corina Machado, una de las figuras centrales en la articulación internacional de apoyo a la dirigente opositora.
En paralelo a la ceremonia oficial, los líderes latinoamericanos y las organizaciones de derechos humanos desarrollarán una agenda de actividades alrededor del Centro Nobel de la Paz, que funciona en un antiguo museo del centro de la ciudad. Una de las acciones más destacadas será la concentración prevista para el miércoles al mediodía en la Plaza del Ayuntamiento de Oslo, donde se instalarán pantallas gigantes para proyectar videos y testimonios sobre las violaciones a los derechos humanos atribuidas al régimen chavista.
Más tarde se llevará a cabo la tradicional Marcha de las Antorchas, organizada por la ONG The Norwegian Venezuelan Justice Alliance, que reclama por la libertad, la democracia y los derechos humanos en Venezuela. Esta movilización, que se realiza desde la década de 1950 en homenaje a los galardonados con el Nobel de la Paz, no contará este año con la organización del Consejo Noruego de la Paz, debido a diferencias ideológicas con la premiada.
La concentración está prevista para las 17:30 (hora local), con una bienvenida a las 17:45 y el encendido de las antorchas a partir de las 18:15. La marcha recorrerá las calles céntricas de Oslo hasta llegar al frente del Stortinget, el Parlamento noruego, donde a las 19:00 se realizará el acto de cierre.
Dentro del Centro Nobel de la Paz, en tanto, las autoridades del premio planificaron actividades culturales con destacados artistas venezolanos, como la pianista y compositora Gabriela Montero y el cantante de reguetón Danny Ocean. El galardón a María Corina Machado será entregado por las autoridades de la fundación Nobel junto a los cuatro jefes de Estado confirmados: Milei, Peña, Noboa y Mulino Quintero.
Entre los asistentes también se encontrarán figuras políticas internacionales, como la congresista estadounidense María Elvira Salazar y la diputada española Cayetana Álvarez de Toledo. Por parte del Gobierno argentino viajará además Gabriel Volpi, encargado de negocios de la Argentina en Venezuela, quien mantiene estrechos vínculos con el entorno de Machado.
El contexto de la premiación está marcado por una fuerte escalada de tensión internacional. En los últimos días, la oposición venezolana denunció la muerte en prisión de Alfredo Díaz, ex gobernador del estado Nueva Esparta, quien permanecía detenido en El Helicoide, sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN). En un comunicado conjunto, Machado y González Urrutia responsabilizaron directamente al régimen por lo ocurrido y denunciaron violaciones sistemáticas a los derechos humanos.
Estados Unidos también atribuyó la muerte del ex gobernador al chavismo y calificó el hecho como "otro recordatorio de la naturaleza criminal del régimen de Maduro". La declaración se dio en medio del despliegue militar estadounidense en el mar Caribe, bajo el argumento de combatir el narcotráfico y en un clima de máxima presión sobre Caracas.
De hecho, a fines de noviembre, el propio Donald Trump mantuvo una comunicación telefónica con Maduro para advertirle que Washington intensificará las acciones si no abandona el poder en el corto plazo, un escenario que refuerza el contenido político de la presencia de Milei en Oslo.