El fiscal José Federico Delgado murió este domingo por la mañana a sus 54 años luego de atravesar una dura enfermedad. 

Así lo confirmó el Ministerio Público Fiscal (MPF) de la Nación a través de un breve comunicado.

“El Ministerio Público Fiscal de la Nación expresa su profundo pesar por el fallecimiento de José Federico Delgado y envía sus condolencias a sus familiares, amigos y colaboradores”, fue el comunicado con el que confirmaron la trágica noticia.

Delgado había sido diagnosticado con cáncer de pulmón, pero continuó trabajando en la fiscalía N°6 de la Ciudad de Buenos Aires, en medio del tratamiento y de la quimioterapia. En los últimos meses, su salud empeoró y dejó de trabajar.

El titular de la Fiscalía N°6 de la Ciudad de Buenos Aires llevó adelante causas conocidas como la investigación a José López, exsecretario de Planificación del kirchnerismo, por enriquecimiento ilícito.

Licenciado en Ciencias Políticas, también estuvo a cargo de la investigación conocida como Panamá Papers durante los primeros días de la gestión de Mauricio Macri, en una causa que vinculó al expresidente.

El también profesor universitario investigó la tragedia de Once, donde 52 personas murieron y otras 789 resultaron heridas por el impacto del tren en la estación Once durante la mañana del 22 de febrero de 2012.

Entre otras causas conocidas que llevó adelante están: el pago de sobornos en el Senado de la Nación, el megacanje de la deuda externa y la tragedia de la fiesta electrónica llamada Time Warp. Además, investigó las redes de trata de personas y las violaciones a los derechos humanos cometidas durante la dictadura en el Primer Cuerpo del Ejército.

En los últimos años de su vida profundizó sus críticas hacia el sistema judicial de la Argentina, luego de que la Corte Suprema de Justicia suspendiera las elecciones en San Juan y Tucumán a menos de una semana de su realización.

Delgado dijo que el sistema judicial “parece estar habitado por un interés particular por fuera de la Constitución” y pidió que se promulgue “una ley” para que la Corte Suprema “tenga plazos para fallar”.

“A cualquier juez del país le llegan casos y tiene un término especial para tomar una decisión, un mes dos meses o tres días. Nuestra Corte no tiene plazos para fallar. Eso es algo malo, fomenta las condiciones para que se haga el 'muñequeo' del expediente. Eso se arregla con una ley”, dijo en mayo en declaraciones radiales.