Las fiestas de la Virgen del Valle son sin duda el espacio en el que no solo los peregrinos y promesantes llegan hasta sus pies para dar gracias o pedir por una gracia en partticular. El novenario de diciembre, es para muchos catamarqueños, el tiempo de hacer una visita especial para poder compartir con otros la fe y especialmente, para ser agradecidos por todo lo recibido durante el año. Con ese espíritu es que los niños y niñas de la Casa Cuna llegaron este jueves hasta la Catedral, para vivir la experiencia de celebrar su niñez y pedir para que todos los chicos y chicas sean cuidados y respetados, tal y como le gustaría a la Madre Morena, que todos lo sean.
Los menores, acompañados por Catalina Mussetti, directora del organismo estuvieron junto a la Sagrada Imagen en un emotivo momento y tal como lo manifestó la titular del organismo, “fue nuestro homenaje a Ella y también, el momento para pedir la bendición para nuestros niños y también todos los chicos de nuestra provincia, la Patria y el mundo entero”. Este pedido es más que oportuno, en vista de la dura realidad que la minoridad atraviesa, acosada no solo por el abandono físico, sino también por el emocional, sumando sin dudas las carencias económicas y sociales.
La familia y reinserción
“Cada vez es más compleja la realidad de las familias de nuestros niños, en particular, Lamentablemente está muy presente el tema del consumo de sustancias y hasta la salud mental, que terminan siendo situaciones recurrentes, que hacen cada vez más difícil la restitución a sus entornos biológicos”, comentó al momento de descrirbir la realidad de los niños residentes en Casa Cuna. La prioridad siempre es poder hacer que ese menor regrese al seno faimiliar, siempre y cuando, este sea el espacio adecuado para su crecimiento. Lo triste es que muchas veces, esto no es posible. En ese punto, y en el diálogo que se mantuvo Mussetti, indicó que en la búsqueda de esa restitución, se intenta también poder lograrla con la familia ampliada, es decir, tíos, abuelos o los padrinos, para de esta manera evitar la institucionalización del menor. “Lamentablemente esto es cada vez más dífícil”, refirió.
Ante esto y en función de esta dura realidad, es el Estado el que debe seguir velando por el bienestar de los menores, tal y como se hace con quienes residen en Casa Cuna.
Corresponsabilidad
Esto trae a colación, también la responsabilidad de la sociedad, para poder estar alertas a los casos de maltratos, abusos, abandonos u otras situaciones de vulneración grave. Si una persona es testigo de eso, como recomendó la directora del organismo, se debe llamar a la línea 102, donde la denuncia es completamente anónima. Desde allí se activa un proceso, desde la Secretaría de la Familia, en el que básicamente se interviene, constata o no la situación, y en el caso de confirmarse, se pone al resguardo al niño o niña.
Mussetti, al describir este proceso, marcó "siempre se trata de poner al resguardo con algún otro famiiliar y si no se puede, se decide institucionarlizarlo bajo lo que se llamar ´una medida excepcional´. A parir de allí se da aviso a la Justicia y se inicia ahí un trabajo. Esto no significa que inmediatamente es puesto en adopción, sino que realizan tareas, que están previstas por ley. Si todo ese proceso fracasa, recién ahí por medio del Juzgado de Familia se llega a un posible estado de adoptabilidad de ese niño.
En el medio, la funcionaria reiteró, que en el contexto de procurar entre todos lo mejor para nuestros niños, la sociedad debe adoptar la corresponsabilidad, para de esta manera estar alertas y actuar ante las muchas formas de maltrato y abandono. Luego y para seguir siendo solidarios y responsables, indicó que esto en la institución es bien conocido, porque a diario reciben el apoyo y colaboración de muchos. “Como Casa Cuna es emblemática, gracias a Dios recibimos mucho de otras instituciones u organismos, y también de toda la sociedad, quienes nos hacen llegar ropa, calzado y hasta alimentos. Gracias a todo esa ayuda que hacemos llegar a nuestros niños para que esté bien, además en muchas ocasiones también nosotros colaboramos con otras situaciones puntuales en familias o en barrios, para que así también situaciones de vulnerabilildad social”.
