En una mañana marcada por la lluvia, Catamarca dio inicio este jueves con la Fiesta de la Protección de Nuestra Madre del Valle, una celebración que conmemora los 21 años del sismo que sacudió la provincia en 2004. Los festejos, que se desarrollan bajo el lema "Peregrinos de esperanza", también se enmarcan en el Año Jubilar y coinciden con el 4º aniversario de la beatificación de Fray Mamerto Esquiú.
Los actos centrales comenzaron con la emotiva Bajada de la Sagrada Imagen de la Virgen. Acompañada por el obispo diocesano, Mons. Luis Urbanč, y otros sacerdotes, la figura fue trasladada desde el Camarín hasta el presbiterio, donde la esperaban sus fieles devotos con cantos, aplausos y muestras de alegría. Posteriormente, el obispo guió el rezo del Santo Rosario frente a la imagen, que fue colocada en la urna utilizada habitualmente para la solemne procesión.
Traslado a Piedra Blanca
La jornada continuará por la tarde con un evento especial. A las 17:30, la imagen de la Virgen del Valle será trasladada desde la Catedral Basílica hasta San José de Piedra Blanca. En este lugar, a las 19:00, se realizará una procesión alrededor de la plaza principal, que contará con las imágenes del Señor de los Milagros, la Virgen del Valle y el Beato Mamerto Esquiú.
Tras la procesión, el obispo Urbanč presidirá una Santa Misa en honor a la beatificación de Fray Mamerto Esquiú. Al finalizar, la imagen de la Virgen regresará a la Catedral Basílica, donde se celebrarán misas a las 18:00 y 20:00 horas.
Las actividades continuarán el viernes 5 de septiembre, con misas programadas a las 7:00, 9:00, 11:00, 18:00 y 20:00 horas en la Catedral.
