La cada vez más acuciante realidad argentina y obviamente, que la local no se queda atrás, hace que devociones tan populares como la de San Cayetano no solo se mantengan en el tiempo, sino que crezcan día con día. Por eso este 7 de agosto, fecha en la que se recuerda especialmente al Patrono del Pan y del Trabajo, los fieles catamarqueños salieron a hondarlo, darle gracias y pedir por las fuentes laborales.
En el caso de la Capital, dos son los lugares que siempre son de gran concurrencia. La primera de estas está en el sur capitalino en la capilla ubicada en la esquina de calles Tucumán y Gobernador Fortunato Rodríguez, jurisdicción de la parroquia Sagrado Corazón de Jesús. Allí culminó este miércoles el triduo en honor del Santo Patrono. A las 17.30 hs se llevó a cabo la procesión con la imagen de San Cayetano, por calles Gobernador Rodríguez, 1 de Mayo, La Rioja, Tucumán hasta Gobernador Rodríguez. Al finalizar este acto de fe, se celebró la Santa Misa. Luego los fieles compartieron un chocolate comunitario.

En tanto, en Choya, en la capilla Señor del Milagro de Choya, jurisdicción de la parroquia Santa Rosa de Lima, las festividades se vienen realizando bajo el lema “San Cayetano, enséñanos a orar por el pan de cada día”. Las mismas cerrarón este miércoles a las 16.30 con la Santa Misa y Procesión.

“¿Qué le puedo ofrecer a San Cayetano?”
La celebración eucarística, como todos los años, estuvo precidida por Mons. Luis Urbanc y fue concelebrada por el Padre Salvador Armengol Acevedo, párroco del Sagrado Corazón de Jesús. Durante la homilía, el Obispo diocesano, en referencia al santo patrono del Pan y del Trabajo dijo: “Nos congregamos en este templo donde honramos habitualmente a San Cayetano. ¿Y hoy cada uno de nosotros nos tenemos que preguntar qué le traemos a San Cayetano en nuestro corazón, desde el año pasado a este año? Han pasado 365 días y en qué he mejorado y he corregido de mi vida cristiana. Porque si hoy vengo a acá y no le presento algo nuevo en mi vida, se va a poner muy triste San Cayetano, que ha estado intercediendo por cada uno de nosotros ante el Señor. Esto es lo que primero cada uno de nosotros se tiene que preguntar. ¿Qué le puedo ofrecer a San Cayetano y no que le puedo pedir?"
Luego agregó: “Miren, la mejor manera de recibir bendiciones de Dios es a través de nuestra alabanza a Dios. Entonces San Cayetano si nos encuentra dispuestos a la alabanza, a la gratitud a Dios porque nos permitió vivir un año más. Quizás el año pasado estábamos muy agobiados y hoy estamos nuevamente acá. Dios nos conservó la vida, nos conservó la salud. Dios nos concedió el trabajo o de hacer alguna cosa. Probablemente necesitamos mayor estabilidad y serenidad en nuestro trabajo, pero nosotros si estamos al lado de Dios, por intercesión de San Cayetano, podremos tener la esperanza cierta de que Dios nos va a acompañar por el año que tenemos por delante”.

FOTOS: GUSTAVO ROLDÁN / LA UNIÓN