Día Mundial de la Diabetes: alertan por el aumento de casos y refuerzan la prevención
En Argentina, más del 12% de la población vive con diabetes y la mitad aún no lo sabe. Especialistas del Hospital San Juan Bautista remarcan la importancia del diagnóstico temprano, la educación continua y los hábitos saludables para evitar complicaciones graves.

Cada 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, una fecha que busca visibilizar esta enfermedad crónica cuya incidencia sigue en aumento y que, en gran parte de los casos, puede prevenirse con cambios sostenidos en el estilo de vida. Bajo el lema internacional "Educación para proteger el futuro", el Ministerio de Salud adhiere a la campaña global, enfocada este año en promover hábitos saludables, fortalecer la detección temprana y reforzar el rol de la educación sanitaria como herramienta fundamental para reducir complicaciones.

En Argentina, la diabetes afecta al 12,7% de la población, de acuerdo con los datos de la última Encuesta Nacional de Factores de Riesgo. Las cifras son aún más preocupantes si se tiene en cuenta que aproximadamente la mitad de quienes la padecen no han sido diagnosticados, lo que incrementa el riesgo de desarrollar daños severos en órganos y tejidos. Este escenario vuelve indispensable el trabajo articulado entre el sistema sanitario y la comunidad para mejorar la prevención y el acceso a controles de rutina.

Un abordaje integral para una enfermedad silenciosa

Desde el Hospital Interzonal San Juan Bautista, el endocrinólogo Dr. Carlos Toloza, referente del servicio, subraya la necesidad de comprender la diabetes como una enfermedad que requiere un enfoque integral y permanente.

"La diabetes puede transcurrir silenciosamente durante mucho tiempo. Por eso es fundamental la prevención, la detección temprana y el control de los factores de riesgo. Con un acompañamiento médico sostenido se puede enlentecer su evolución y mejorar la calidad de vida", explicó el especialista.

El equipo de Endocrinología del hospital detalla que la diabetes tipo 2, la más frecuente, está estrechamente asociada al exceso de peso, la mala alimentación y el sedentarismo. Cuando no se controla adecuadamente, puede provocar complicaciones graves como retinopatía, pie diabético, nefropatía, afecciones cardiovasculares y otras condiciones que afectan directamente la autonomía y bienestar de las personas.

Síntomas a tener en cuenta 

Una de las características más riesgosas de la diabetes es que, en sus etapas iniciales, no presenta síntomas evidentes. Sin embargo, las señales de alerta más comunes incluyen sed excesiva, pérdida de peso inexplicable, aumento del apetito, micción frecuente y sequedad bucal.

El diagnóstico se realiza mediante análisis de laboratorio que evalúan la glucosa en sangre, como la glucemia en ayunas o la prueba de tolerancia oral a la glucosa. Detectar la enfermedad a tiempo permite iniciar un tratamiento oportuno y evitar daños a largo plazo.

Prevención: hábitos que marcan la diferencia

Desde el Hospital San Juan Bautista recuerdan que la diabetes tipo 2 es prevenible en la mayoría de los casos. Entre las recomendaciones principales se destacan:

Mantener un peso adecuado.

Seguir una alimentación equilibrada rica en frutas, verduras y alimentos frescos.

Realizar actividad física regular.

Evitar el tabaco y moderar el consumo de alcohol.

Controlar el estrés.

Asistir a controles médicos periódicos, especialmente en personas con antecedentes familiares, sobrepeso o hipertensión.

Factores de riesgo y seguimiento

La edad, el exceso de peso, la hipertensión y el colesterol elevado son factores que incrementan la probabilidad de desarrollar la enfermedad. En el caso de las mujeres, haber cursado un embarazo con diabetes gestacional constituye un antecedente que requiere control médico posterior.

En el marco del Día Mundial de la Diabetes, el Ministerio de Salud y el Hospital Interzonal San Juan Bautista enfatizan que educación, prevención y diagnóstico temprano son pilares esenciales para garantizar una mejor calidad de vida y reducir el impacto de una enfermedad que, cuando se aborda a tiempo, puede ser controlada eficazmente.