Como cada 2 de abril, hoy se conmemora el Día Mundial sobre la Concientización del Autismo. Además de dar a conocer lo que significa el trastorno del espectro autista (TEA) y las distintas necesidades de los pacientes y su entorno, la jornada tiene como objetivo derribar mitos con relación al tema.
La fecha fue establecida por la Asamblea General de las Naciones Unidas con la finalidad de mejorar la calidad de vida de las personas que tienen este trastorno. Por ello, el organismo brega hoy “por un mundo neuroinclusivo para todos”.
¿Qué es el trastorno del espectro autista?
Según informa el Gobierno en su sitio web, el Trastorno del Espectro Autista (TEA) es una afección del neurodesarrollo que presenta alteraciones en la comunicación y en las interacciones sociales, junto a otras características, como comportamientos repetitivos, restringidos y estereotipados.
Las manifestaciones pueden ser muy variables entre las distintas personas de acuerdo a su crecimiento y maduración, y generalmente tienen impacto de por vida.
Las señales que pueden aparecer y ayudar a detectar que una persona tiene autismo son:
- Falta de respuesta cuando al niño o niña lo llaman por su nombre (a partir del año).
- No señala objetos mostrando su interés (a partir de los 14 meses).
- No juega con situaciones imaginarias (a partir de los 18 meses).
- Evita el contacto visual y prefiere estar en soledad.
- Retraso en el desarrollo del habla y del lenguaje.
- Falta de reciprocidad ante la demostración de los sentimientos de otras personas.
- Irritabilidad frente a cambios mínimos.
- Repetición de palabras o frases.
- Movimientos incontrolados del cuerpo, sobre todo de las manos.
Es importante estar atentos a estas señales y consultar con especialistas dado que, si bien no existe una cura para el trastorno del espectro autista, los tratamientos de estimulación temprana contribuyen a mejorar el habla, el movimiento y la interacción social, y ayudan a desarrollar las habilidades afectadas.
Cambio de perspectiva respecto al autismo
Desde la página oficial de la Organización General de las Naciones Unidas (ONU), se propone un cambio de narrativa respecto del autismo. “Hemos abandonado la idea de curar o convertir a las personas con autismo para centrarnos en su aceptación, apoyo, inclusión y la defensa de sus derechos”, se puede leer en el sitio web de la entidad.
Esto significa un gran cambio para todas las personas con TEA, sus aliados, la comunidad de la neurodiversidad y el mundo en general, dado que les permite reivindicar su dignidad y autoestima, e integrarse plenamente como miembros valiosos de sus familias y sociedades.
A pesar de esto, en el día a día, las personas con autismo continúan enfrentándose a la discriminación y a otros desafíos. Por un lado, porque este grupo de personas tiene una amplia gama de talentos que muchas veces no son reconocidos; y por el otro, porque los niveles de concientización y aceptación varían drásticamente de un país a otro. Asimismo, quienes tienen autismo son especialmente vulnerables a los cambios y trastornos de las rutinas, como las pandemias, las guerras y los desastres naturales.
Es por eso que el Día Mundial sobre la Concientización del Autismo también sirve para plantearse nuevos desafíos como sociedad y para destacar las contribuciones que hacen estas personas al mundo con su aporte en el hogar, el trabajo, las artes y la elaboración de políticas.
