Las garrapatas son parásitos que se alimentan de la sangre de animales y personas, y aunque suelen habitar en espacios verdes, pueden invadir tu hogar al ser transportadas por las mascotas. Además de ser los ácaros más grandes, son conocidos transmisores de bacterias y enfermedades peligrosas.
Si bien los insecticidas comerciales son una opción popular, también pueden ser tóxicos para las mascotas y las personas. Sin embargo, existen alternativas caseras, económicas y efectivas para combatirlas. Solo vas a necesitar ingredientes que seguro podés encontrar en casa: vinagre, bicarbonato de sodio y sal.
Vinagre y agua: una combinación poderosa
El vinagre, que puede ser de manzana o común, es un ingrediente versátil que también resulta ser un enemigo natural de las garrapatas. Su olor fuerte y su acidez actúan como un repelente efectivo. El paso a paso para esta técnica:
Mezclá vinagre y agua en partes iguales.
Colocá la mezcla en un rociador.
Aplicá directamente sobre las zonas donde hayas visto garrapatas o donde creés que podrían estar.
Esta solución también es segura para las mascotas y el hogar, siempre que puedas evitar aplicarla directamente sobre la piel de los animales sin diluir.
Bicarbonato de sodio y sal
Otra alternativa casera y efectiva es la combinación de bicarbonato de sodio y sal, dos ingredientes comunes con propiedades deshidratantes que eliminan a estos parásitos de manera natural.
Mezclá bicarbonato de sodio y sal en proporciones iguales.
Espolvoreá la mezcla sobre alfombras, camas de mascotas y otras superficies donde puedan estar las garrapatas.
Dejá actuar por varias horas antes de aspirar o barrer la zona.
Este método es ideal para tratar áreas de alto tránsito y espacios donde las garrapatas podrían esconderse.
Ventajas de estos métodos
Seguros: no contienen químicos tóxicos que puedan afectar a tu familia o tus mascotas.
Económicos: utilizan productos que seguramente ya tenés en casa.
Eficaces: ayudan a combatir las garrapatas sin dañar el medio ambiente ni tu salud.