El truco casero para eliminar manchas de baba y humedad de la almohada que ya utilizan muchos hogares de Catamarca
Una técnica simple, económica y efectiva permite remover suciedad y malos olores de las almohadas utilizando solo vinagre y agua. Cómo aplicarla correctamente y por qué se producen estas manchas.

En los hogares de Catamarca, como en el resto del país, los trucos caseros siguen siendo aliados habituales para resolver tareas domésticas, desde desinfectar la casa hasta recuperar objetos dañados. Entre las consultas más frecuentes aparece una preocupación común: cómo limpiar las manchas de humedad y baba de la almohada, que con el tiempo pueden generar olor e incluso dañar la tela.

Antes de aplicar este método, conviene entender el origen de estas marcas. Las almohadas suelen acumular humedad, saliva, sudor y partículas del ambiente que dejan círculos amarillentos o aureolas difíciles de remover. Dormir con el cabello mojado, la transpiración nocturna o la saliva son factores que aceleran este desgaste. Con el paso del tiempo, la humedad puede filtrarse hacia el interior de la almohada y convertirse en un ambiente propicio para la proliferación de bacterias, ácaros y hongos.

Cómo aplicar el truco casero con vinagre

Para limpiar las manchas de baba y humedad solo se necesitan dos ingredientes: vinagre blanco y agua.

En un recipiente, mezclar partes iguales de vinagre de limpieza y agua.

Humedecer un paño o toalla limpia en la preparación y colocarlo sobre las manchas de la almohada. Presionar y realizar movimientos suaves para que el vinagre penetre en la tela.

Con otro paño humedecido solo en agua, frotar nuevamente las marcas.

Dejar secar la almohada en un espacio ventilado, con buena circulación de aire.

Esta técnica es difundida con frecuencia en redes sociales por cuentas dedicadas a la limpieza —como hongjie_limpieza— y se destaca por su sencillez y efectividad.

Por qué babeamos mientras dormimos

Para entender el origen de estas manchas, también es útil conocer por qué se produce la saliva nocturna. Babear al dormir es una situación común y, por lo general, no implica un problema de salud. Ocurre cuando los músculos faciales y el reflejo de tragar se relajan profundamente durante el sueño.
La posición al dormir, la congestión nasal, alergias, episodios de reflujo o apneas del sueño pueden incrementar la probabilidad de salivar. Ante síntomas persistentes o preocupantes, se recomienda consultar a un profesional de la salud.