El verano puede ser un verdadero desafío para mantener frescas las frutas y verduras, esto se debe a que el calor puede acelerar su maduración y descomposición. Afortunadamente, existe un truco simple, pero eficaz para prolongar su vida útil y mantenerlos frescos por más tiempo, sin importar cuán caluroso sea el clima.
El truco para que las frutas y verduras duren con una técnica de conservación
Uno de los métodos más efectivos y fáciles de aplicar es el uso de papel absorbente para envolver y almacenar las frutas y verduras en el refrigerador. Este truco no solo ayuda a mantenerlos frescos, sino que también previene la formación de moho y la descomposición prematura, dos problemas comunes durante el verano.
La clave está en que las frutas y verduras liberan humedad natural, lo cual, si no se controla, puede acelerar su descomposición. El papel absorbente, cuando se coloca en el envase o en la bolsa de almacenamiento, absorbe el exceso de humedad. De esta manera, se evita que los alimentos entren en contacto con la humedad que podría promover la aparición de bacterias u hongos.
Este método también ayuda a que los productos respiren mejor y se mantengan frescos por más tiempo al evitar el exceso de humedad atrapada en un envase cerrado.
¿Qué alimentos se benefician más?
Aunque este truco puede aplicarse a muchas frutas y verduras, algunos de los más beneficiados son:
- Hortalizas de hoja verde: Lechuga, espinacas, acelga, etc., que son muy propensas a marchitarse o a acumular humedad.
- Frutas como fresas y moras: Estas frutas delicadas tienden a enmohecerse rápidamente en climas cálidos.
- Tomates y pepinos: Pueden volverse blandos si no se almacenan correctamente, pero el papel absorbente ayuda a que conserven su firmeza y frescura.
- Peras y manzanas: Aunque las frutas de cáscara dura generalmente duran más, el papel absorbente puede alargar aún más su vida útil.
Pasos sencillos para aplicar el truco
- Compra frutas y verduras frescas: Selecciona productos que estén en buen estado y sin daños visibles.
- Usa un papel absorbente: Coloca una capa de papel absorbente en el fondo de la caja o el recipiente donde almacenarás las frutas o verduras.
- Envuelve el producto o colócalo dentro del recipiente: Para las frutas delicadas, como las fresas, puedes envolverlas suavemente en el papel absorbente. Para las verduras de hoja, como la lechuga, cubre el fondo del recipiente con una capa de papel absorbente y coloca las hojas encima.
- Almacena en el refrigerador: Guarda las frutas y verduras en el refrigerador, en una zona que no esté demasiado fría para evitar que se congelen, pero lo suficientemente fresca como para mantener su conservación.