Renzo David Robín era un paciente que semanalmente viajaba desde Nueva Coneta al Hospital "San Juan Bautista" para recibir hemodiálisis. De la mano de su familia atravesaba cada tratamiento siempre con la fortaleza y la esperanza que el trasplante llegaría en algún momento.
La historia de Renzo, compartida por el mismo nosocomio capitalino, es la de muchos catamarqueños que atraviesan por esta dura condición. En el proceso de espera, algunas cosas se pierden y otras tantas se ganan. En el caso del joven capayense, el temor era constante. "Desde el día que empecé diálisis fue algo aterrador pensar que por el resto de mi vida iba a tener que pasar tres días de la semana sentado en un sillón, conectado a una máquina para poder vivir", comentó Renzo marcando luego que a pesar de este duro pronóstico nunca bajo los brazos, ni dejó de buscar posibilidades para una mejor calidad de vida.
Renzo junto a su familia
Como él lo cuenta, en este duro camino recorrido durante años, conoció personas que lo acompañaron y asistieron en cada día. Entre ellas están las enfermeras del Servicio de Nefrología que lo cuidaban, y que no olvida de nombrar: Claudia Carrizo, Silvina Díaz y Adriana Oliva. Agrega al equipo médico conformado por Agustín Iriarte y Marta Pernasetti, quienes junto a la Trabajadora social, Angélica Godoy, empezaron la búsqueda de atención en centros de trasplante.
El donante
Según refiere Renzo, es así que también llegaron el DIPROMESI, CAICA, el Hospital Córdoba todos en pos de encontrar un donante que le diera su riñón. Y el ángel mayor fue su hermano Enzo, quien terminó siendo compatible y su donador. "Agradezco el amor y el coraje de un hermano por tomar tan generosa decisión. Donar parte de él para dar vida a otra persona. Ese fue mi hermano, quien desde que yo pregunte en la familia él fue el primero en decir yo. Nunca bajo los brazos ni tuvo miedo. Muchos obstáculos tuvo que pasar, pero no se rindió".
Finalmente, el 28 de Marzo hace casi un mes fue intervenido con el resultado de un exitoso trasplante de riñón realizado con donante vivo. Tras constantes controles y la mejor evolución fue dado de alta este martes y ya se encuentra de nuevo junto a su familia.
"Como parte del sistema de Salud y como un Hospital del interior del país, que pone el doble de esfuerzo para que estos hechos sucedan; estamos felices de la recuperación de Renzo y nos sentimos orgullosos de haber aportado para que cada granito de arena sumara para que todo fuese posible, porque no es más ni menos que el resultado de la suma de todos", indicaron desde el "San Juan Bautista" al referirse sobre esta historia tan aleccionadora.
