Hornear galletas e inundar la casa con un aroma cálido y reconfortante es un plan ideal para compartir en familia durante las tardes frescas de primavera. En Catamarca, donde la tradición casera y las recetas de las abuelas siguen más vivas que nunca, las pepas de membrillo con masa de pastafrola se mantienen como un clásico infalible.
Crujientes por fuera, tiernas por dentro y con ese toque artesanal inconfundible, estas galletitas superan por lejos a cualquier versión industrial. No hace falta ser experto en pastelería: la receta es sencilla, rápida y siempre da buenos resultados, incluso si es la primera vez que se preparan.
El secreto está en la masa de pastafrola, que aporta una textura suave y un sabor mantecoso perfecto para combinar con el dulce del centro. Tradicionalmente se usa membrillo, aunque también se pueden rellenar con dulce de batata, frambuesa o el sabor preferido de cada familia.
Receta de pepas de membrillo con masa de pastafrola
Ingredientes:
250 gramos de harina leudante
100 gramos de manteca
100 gramos de azúcar
1 huevo
1 cucharadita de esencia de vainilla
Dulce de membrillo, cantidad necesaria
Estas galletas llevan pocos ingredientes y se hornean en solo 10 minutos, lo que las convierte en una opción práctica y deliciosa para cualquier merienda.
Preparación:
Precalentar el horno a 180 °C.
En un bowl, batir la manteca con el azúcar hasta obtener una crema espesa.
Agregar el huevo y la esencia de vainilla, y mezclar hasta integrar.
Incorporar la harina leudante y unir hasta formar una masa homogénea.
Dividir en pequeñas bolitas y presionar el centro con la yema del dedo.
Colocar las pepas sobre una bandeja enmantecada o con papel manteca y hornear durante 4 minutos.
Retirar, colocar el dulce de membrillo en el centro y hornear 6 minutos más.
El resultado son galletitas caseras, doradas y suaves, ideales para acompañar un mate o un café en familia, tal como lo hacían las abuelas catamarqueñas.