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Fe y devoción

San Cayetano: por qué se lo celebra como patrono del pan y el trabajo

Miles de fieles en Argentina y el mundo se congregan este jueves para honrar a San Cayetano, símbolo de esperanza en tiempos de necesidad. Conocé su historia y la oración más rezada para pedir empleo y sustento.

7 Agosto de 2025 07.44

Cada 7 de agosto, miles de fieles en Argentina y distintos países celebran el Día de San Cayetano, conocido como el patrono del pan y el trabajo. Como cada año, la fecha convoca a multitudes que participan de peregrinaciones y misas para agradecer y pedir por empleo, salud y sustento.

San Cayetano nació el 1 de octubre de 1480 en Vicenza, Italia, y dedicó su vida a la ayuda a los más necesitados. Fue sacerdote y fundador de la Orden de Clérigos Regulares Teatinos, enfocada en la reforma eclesiástica y la caridad. Falleció el 7 de agosto de 1547 en Nápoles, y fue canonizado por el Papa Clemente X en 1671.

En Argentina, la devoción a San Cayetano comenzó a expandirse en la década de 1930, impulsada por el párroco Domingo Falgioni en el barrio porteño de Liniers, donde se erigió el santuario más importante del país en su honor. Desde entonces, el templo se convierte cada 7 de agosto en epicentro de masivas manifestaciones de fe, donde miles de personas acuden para agradecer o pedir su intercesión en momentos de dificultad.

La oración del pan y el trabajo

Entre las tradiciones más arraigadas en la celebración de San Cayetano, se destaca la oración para pedir pan, trabajo y sustento, que los devotos rezan cada 7 de agosto:

"¡Oh glorioso San Cayetano! Aclamado por todas las Naciones; Padre de Providencia, porque con portentosos milagros socorres a cuantos te invocan con fe en sus necesidades. Te suplico me obtengas del Señor oportuno Socorro en las angustias presentes y sea ello prueba de la bienaventuranza eterna. Amén.

Santísima Trinidad ¡Oh Divina Providencia! Concédeme tu clemencia, por tu infinita bondad, arrodillado a tus plantas, a Ti portento de toda caridad, te pido por los míos casa, vestido y sustento.

Concédenos la salud, llévanos por buen camino, que sea siempre la virtud que guíe nuestro destino. Tú eres toda mi esperanza, eres el consuelo mío, en Ti creo, en Ti confío. Tu Divina Providencia se extiende a cada momento para que nunca nos falte casa, vestido, sustento y los Santos Sacramentos en el último momento."

La figura de San Cayetano continúa siendo símbolo de esperanza y solidaridad, especialmente en contextos de crisis social y económica, donde el pedido de trabajo y sustento básico cobra un sentido profundamente colectivo.