El director técnico de Boca Juniors, Miguel Ángel Russo, recibió el alta médica este viernes por la tarde y abandonó la clínica de alta complejidad de Belgrano, donde había ingresado el pasado martes. El entrenador, de 68 años, había sido internado por una infección urinaria detectada durante unos chequeos de rutina.

Desde el primer momento, su evolución fue favorable. Sin embargo, el cuerpo médico y la familia de Russo decidieron que permaneciera internado para recibir medicación intravenosa hasta asegurar la eliminación completa de la bacteria. Finalmente, el tratamiento concluyó con éxito, lo que generó alivio en el mundo xeneize.

Hasta el momento, el club no ha comunicado la fecha de su regreso a los entrenamientos. El parate por la Fecha FIFA brinda al DT un descanso necesario, ya que el próximo partido de Boca será el domingo 14 de septiembre a las 14:30 hs. contra Rosario Central, como visitante, por el Torneo Clausura.

En tanto en las últimas horas, se viralizó un fragmento de la nota que hizo en Infobae, donde puntualizó sobre su situación personal: "Cuando supe que tenía la enfermedad, confié en los médicos, en la gente que me ayuda, en los especialistas y gracias a Dios la llevé de la mejor manera. A parte siempre me dicen la verdad. 

'Mirá, te vamos a dar esta medicación que es nueva. A lo sumo se te puede caer un poco el pelo y después te crece, pero te provoca estos beneficios', me explicaron y dije: 'Listo, dale'. En un momento se me caía el pelo y parecía que me estaba muriendo y no era así". Y completó: "No puede saber la gente ni tiene que saber porque son cosas intimas mías con el médico. Pero el mundo con este tipo de enfermedades hace un drama y es lo peor porque hoy hay mucha gente que sufre este tipo de cosas y sufre más cuando los demás te miran de otra forma, te tratan diferente. No lo digo por mí sino por lo que sucede generalmente".