El Gobierno nacional continúa promoviendo la competencia de monedas dentro del sistema económico argentino. En esa línea, el Banco Central (BCRA) confirmó que trabaja en una nueva etapa de reformas para habilitar los pagos en dólares y en cuotas con tarjeta de crédito, una medida que ampliaría la operatoria ya vigente con tarjetas de débito.
Así lo confirmó Silvina Rivarola, directora del BCRA, durante una entrevista en el streaming Tiempo Libre: "Se está trabajando para acomodar los sistemas de las tarjetas de crédito, porque tienen toda una ingeniería detrás. Pero para que también pueda haber compras en dólares. También en cuotas".
La iniciativa surge luego de que el ministro de Economía, Luis Caputo, señalara que "todo el que venda en cuotas en dólares va a tener un salto importante en su demanda". El funcionario acompañó sus declaraciones con una foto junto al secretario de Comercio, Pablo Lavigne, el CEO de Ford Argentina, Martín Galdeano, y otros integrantes de la automotriz, en el marco de una reunión sobre inversiones, remonetización en dólares y competitividad.
Actualmente, la posibilidad de pagar en cuotas en dólares existe de forma limitada a través del sistema de débito inmediato programado (Debin), una herramienta que permite pactar con antelación el pago de productos o servicios en cuotas fijas, en pesos o dólares. El sistema requiere la autorización única del cliente, y el importe acordado se debita automáticamente cada mes desde su caja de ahorro.
Sin embargo, el Debin presenta limitaciones: no hay intermediación bancaria ni cobertura de riesgo, lo que implica que el comercio queda expuesto ante una eventual falta de fondos en la cuenta del consumidor. "Es una operatoria muy riesgosa para los comercios, ya que entregan el producto o servicio y el cobro depende de que haya plata cuando llegue la fecha de débito", explicaron desde una empresa del ecosistema de pagos.
Desde una entidad financiera confirmaron a LA NACION que el riesgo de impago recae íntegramente sobre el comerciante, sin respaldo del banco. "Con la foto que subió Caputo, hay que ver quién pone ese riesgo... si la concesionaria, Ford, o ambos", cuestionó una fuente del sector.
El sistema se inspira en un mecanismo utilizado por la plataforma de viajes Despegar, que desde el año pasado permite financiar viajes al exterior en hasta tres cuotas sin interés, pese a las restricciones del cepo cambiario. La empresa asumió la financiación bajo la condición de que el pago esté completo siete días antes del vuelo. Ese modelo fue tomado como referencia por el BCRA para el diseño del Debin programado.
La extensión de estas facilidades a las tarjetas de crédito busca ampliar el alcance de este tipo de transacciones, con respaldo financiero y menos riesgo para los comercios. De concretarse, será un paso más en el camino hacia la liberalización de las operaciones en moneda extranjera dentro del país.
