La Aduana impidió el contrabando de 9288 botellas de vino de primeras marcas, en Posadas, Misiones, que tenían como destino localidades ubicadas en la frontera con Brasil.
Desde el organismo fiscalizador, señalaron que la mercadería no contaba con la documentación necesaria para respaldar el envío y que, por su precio y cantidad, no se correspondía con el nivel de consumo propio de esos lugares.
El valor de la mercadería secuestrada asciende a $84.280.000 e incluye en su mayoría vinos de etiquetas de alta gama como El Gran Enemigo, Catena Zapata, Angélica Zapata, Familia Millán y Rutini, entre otras.
La Dirección General de Aduanas incautó 1130 cajas, de 6 vinos cada una, cuyo precio por botella ronda los $7000; 350 cajas de 4 vinos, con un precio por botella de $11.500 y, finalmente, 960 botellas con un valor unitario en torno a los $18.500. Además, se incautó 148 botellas de vino chileno, con un valor de $20.000 por unidad.
“El nivel de acopio de botellas en puntos fronterizos resulta extremadamente sospechoso, dado que supera ampliamente la capacidad de consumo de localidades como Bernardo de Irigoyen y Puerto Iguazú”, indicaron desde la AFIP.
Desde la Aduana aclararon que el cálculo que realizó el organismo no contempla solamente la cantidad de personas que habitan en los lugares de frontera que figuraban como destino de los vinos sino, incluso, el consumo que pudieran realizar turistas brasileños al visitar la Argentina.
“No resultaba creíble que el stock de botellas apuntara al consumo local, más cuando las etiquetas halladas correspondían a un público de alto poder adquisitivo”, señalaron desde el organismo que conduce Guillermo Michel.
Ante la situación, la AFIP considera que la intención detrás de las maniobras detectadas era enviar a Brasil las botellas de contrabando por pasos terrestres no autorizados y cuando los depósitos acumularan suficiente mercadería, los vinos fueran transportados hacia grandes ciudades como Porto Alegre, Curitiba y Florianópolis, donde su valor puede llegar a cuadruplicarse.
“El mercado de vino en Brasil está creciendo a pasos agigantados y en años recientes se ha consolidado como el país de América latina que más importa” agregaron.
