Milei insiste en que el cambio no está atrasado y ratificó su intención de levantar el cepo
El Presidente cruzó a los especialistas que cuestionan el esquema de dólar "barato", como Domingo Cavallo. "La estupidez que dijo es irritante e insultante", aseguró.

El presidente  Javier Milei ha reiterado su intención de eliminar el cepo al dólar para 2025, asegurando que en 2026 esta medida será parte del pasado. Durante una reciente declaración, explicó que se necesitan tres condiciones clave para liberar el mercado de cambios de manera sostenible.

"De acá a un año, en 2026, me van a decir: 'Usted volvió a cumplir; el cepo es cosa del pasado'", se jactó, y cruzó  a los economistas que aseguran que el tipo de cambio está atrasado, cómo advirtió Domingo Cavallo. 

Milei respondió: "El tipo de cambio, desde mi perspectiva, no está atrasado. Me parece una vergüenza la declaración de Cavallo. Me sorprende para mal su juicio tan ligero y tan mal fundamentado técnicamente para hacer un disparo de estas características. En especial porque cuando él era ministro le hablaban de tipo de cambio y se ponía como loco, y bastante violento. Recuerden las cosas que hizo durante 1994 y 1995 en el medio del efecto tequila, cómo se ponía y las cosas que decía".

Las tres condiciones para liberar el mercado de cambios

Desaparición de la inflación: Milei enfatizó que la inflación debe reducirse a niveles manejables antes de proceder. Explicó que el efecto rezagado de la emisión monetaria, estimado entre 18 y 24 meses, debe ser completamente absorbido. Los últimos datos muestran una inflación mensual del 2,4%, con bienes al 1,6% y alimentos al 0,9%, indicando una posible deflación mensual en dólares del 13% anual. Si esta tendencia se mantiene por tres meses consecutivos, el gobierno podría abandonar el "crawling peg".

Resolución de los problemas de stocks del Banco Central: El mandatario destacó que el Banco Central enfrenta un déficit de entre 11 y 12 mil millones de dólares. Milei confía en conseguir estos fondos a través del Fondo Monetario Internacional o grandes inversores, lo que permitiría solventar los problemas de stocks y eliminar el cepo.

Equilibrio en la base monetaria: El tercer requisito implica manejar la brecha entre la base monetaria amplia y la observada mediante políticas del Banco Central. Milei asegura que este aspecto también es controlable.

Polémica por el tipo de cambio: Milei responde a Cavallo

El presidente también enfrentó las críticas de economistas que aseguran que el tipo de cambio está atrasado. Domingo Cavallo, exministro de Economía, afirmó recientemente que existe un atraso del 20% en el tipo de cambio, comparándolo con los últimos años de la convertibilidad. Milei desestimó estas declaraciones, calificándolas de "vergonzosas" y "técnicamente mal fundamentadas".

Según Milei, el tipo de cambio real, indicador utilizado por sus críticos, es una metodología defectuosa que sesga los datos al elegir puntos de referencia convenientes, como el periodo posterior a la convertibilidad. En su defensa, Milei argumentó que el modelo fiscal actual es más sostenible que el de los años noventa y destacó que la devaluación por sí sola no garantiza el crecimiento económico, como lo demuestra la historia reciente de Argentina.

Milei respondió: "El tipo de cambio, desde mi perspectiva, no está atrasado. Me parece una vergüenza la declaración de Cavallo. Me sorprende para mal su juicio tan ligero y tan mal fundamentado técnicamente para hacer un disparo de estas características. En especial porque cuando él era ministro le hablaban de tipo de cambio y se ponía como loco, y bastante violento. Recuerden las cosas que hizo durante 1994 y 1995 en el medio del efecto tequila, cómo se ponía y las cosas que decía".

Y siguió: "El equivalente de ese tipo de cambio que él defendía era de 700 pesos de hoy. Argentina no tenía equilibrio fiscal; y nosotros sí, y este es un tema no menor. Su declaración me parece desafortunada e incorrecta en términos técnicos. ¿Por qué está mal el análisis que hacen los economistas que yo llamo econochantas de mandrilandia? Porque usan un indicador que se llama tipo de cambio real que computa cómo se mueve el tipo de cambio nominal, la inflación internacional y la inflación local. Es irritante e insultante la estupidez que dijo", agregó.

"El punto es, ¿dónde hacen el corte de fechas? Qué casualidad que hacen el corte en 2002, justo cuando se salió de la convertibilidad y hubo un overshooting altísimo, con el tipo de cambio real más alto de la historia argentina. Llegó a tocar casi los 4 pesos. La contracara era un 57% de pobres y una caída del 11% de la economía en el año. Es decir, que están sesgando la muestra", siguió.

Y cerró: "¿Por qué no toman desde enero del '91? El número les da mucho más bajo. Nosotros somos más confiables de lo que hubo durante la convertibilidad. Les quiero dar una lección a los econochantas de mandrilandia para que no les alcance toda la vaselina que hay en el mundo. El tipo de cambio real como metodología es una basura; no sirve. Solo economistas mediocres, no formados, pueden usar eso. Si devaluar fuera una receta, Argentina tendría que ser potencia. Y no es el caso, porque Argentina se destruyó".

Un plan ambicioso en un contexto desafiante

El plan de Milei para eliminar el cepo al dólar y estabilizar el mercado cambiario enfrenta un escenario complejo. Si bien sus propuestas buscan abordar problemas estructurales, como la inflación y el déficit del Banco Central, también han generado controversia en el ámbito económico. Sus críticas hacia el uso de indicadores tradicionales, como el tipo de cambio real, refuerzan su postura disruptiva frente a las políticas económicas convencionales.

Un futuro incierto pero con grandes expectativas

El compromiso de Milei de levantar el cepo al dólar y su postura crítica hacia las metodologías tradicionales reflejan su enfoque audaz para abordar los desafíos económicos de Argentina. Aunque sus propuestas generan opiniones divididas, representan un intento claro de transformar la economía del país. La clave estará en la implementación efectiva de estas medidas y en la capacidad del gobierno para sortear los riesgos asociados. La promesa de un mercado cambiario libre podría redefinir el panorama económico argentino si las condiciones necesarias se cumplen en los próximos meses.