La inflación obliga a los comerciantes a remarcar sus precios con una frecuencia inusitada. Quioscos, textiles, gastronómicos o el que sea, no tiene opción, si es que pretende mantener vivo su negocio. Y deben cambiar una y otra vez los valores exhibidos.

En Neuquén, un parrillero se hartó y tomó una drástica, pero "cómoda" decisión, en función del tiempo que le lleva cambiar sus pizarras con precios para que los potenciales clientes observen, analicen, se tienten e ingresen.

En Tik Tok se hizo viral la imagen del gastronómico en cuestión, quien decidió dolarizar sus precios, por lo menos el del choripán. "Dos dólares", con la aclaración debajo que aclaraba que la cotización de referencia es el "blue".

Es decir que le cobra a sus clientes por el popular sandwich de chorizo cerca de 400 pesos.

Según el relevamiento del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), en 80 carnicerías de Capital Federal y el Gran Buenos Aires (GBA), el precio de la carne vacuna aumentó 10,8% en la venta al consumidor durante noviembre. Esto se traduce en un alza del 75,5% respecto a igual mes del 2020.

Si a esto le sumamos los aumentos que ha registrado el pan, que en noviembre en Mendoza fue entre el 12% y el 15%, el resultado lleva a un choripan cada vez más caro.

Pero por más insólito que resulte, no es la primera vez que en las redes sociales aparece un caso como este.

En octubre de 2020 circuló por Twitter un cartel similar que ofrecía el mismo manjar, pero a un dólar en un puesto callejero.

Un año después, la estrategia es la misma. Pero el precio es el doble.