Gran Hermano sorprendió a los participantes con el ingreso de dos cachorros mestizos, que rápidamente se ganaron el corazón de los televidentes. Aunque fueron llamados Moro y Caramelo, en las últimas horas los jugadores descubrieron que uno de ellos es hembra, y ahora le dicen Delmora, en honor al conductor del ciclo.
Para dos de los concursantes fue amor a primera vista, y ya le comunicaron a la producción que quieren adoptarlos. Se trata de Romina y Marcos, que por ahora comparten la crianza con el resto de sus compañeros. La gran duda es saber cuándo y cómo saldrán de la casa más famosa del país. Mientras que un rumor afirma que los sacarán en 15 días, también hay una fuerte versión de que se quedarán hasta el último día, como pasó con Kimba en 2011.
Las grabaciones confirmaron que el que más se ocupa de los animales es el joven salteño, que además es el gran candidato a ganar esta edición. Se levanta temprano para darles de comer y limpiar sus excrementos, además de jugar con ellos y hacerles mimos.
El drama de Marcos en la casa de “Gran Hermano”: está pasando hambre y ya perdió varios kilos
Marcos Ginocchio ya no soporta perder la prueba semanal en Gran Hermano, porque eso los obliga a contar con la mitad del presupuesto para las compras en el supermercado de la casa. Bajó de peso por el hambre que pasa y hasta tuvo que hacerle otro agujero al cinturón porque le quedaba grande.
El candidato a ganar esta edición se mostró muy preocupado por su estado de salud, pero lo tranquiliza saber que falta un mes para que se termine el ciclo. Una vez afuera de la casa, podrá visitar a una nutricionista y disfrutar del locro, su comida favorita.
En diciembre, Marcos le había confiado a Agustín que no quería repetir porciones para no perjudicar a ningún compañero. “Estás muy flaco, te desinflaste”, le dijo Frodo, pero él se negó a pedir más alimentos. Como si fuera poco, esta semana Julieta y Daniela se olvidaron lo único que les había pedido del super: una caja de té para merendar.
