La operación "Midnight Hammer" (Martillo de Medianoche), con la que Estados Unidos atacó por sorpresa instalaciones nucleares iraníes, representó el mayor bombardeo con aviones B-2 Spirit en la historia del país. La misión, preparada durante meses, incluyó el uso estratégico de señuelos para tomar desprevenido a Irán, según detallaron altos cargos del Pentágono en una rueda de prensa este domingo.
Los funcionarios ofrecieron pormenores de la operación con la que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, intervino en el conflicto entre Israel y la República Islámica. El objetivo oficial, según se indicó, es evitar que Irán desarrolle una bomba nuclear.
"Ningún otro país del mundo podría haber llevado a cabo una operación como esta", afirmó el secretario de Defensa, Pete Hegseth, quien destacó el "mayor poderío militar que el mundo haya visto jamás" de Estados Unidos.
El mayor despliegue de B-2 en la historia
La operación involucró a más de 125 aeronaves, incluyendo siete bombarderos B-2, aviones cisterna de reabastecimiento, aeronaves de reconocimiento y cazas. En total, se emplearon 75 bombas y misiles durante el ataque.
Los bombarderos B-2 Spirit, diseñados para penetrar defensas aéreas pesadas y realizar ataques de precisión con alta invisibilidad en los radares, lanzaron más de una docena de bombas antibúnker de 13.600 kilogramos sobre dos instalaciones nucleares clave: Fordó y Natanz. Complementariamente, Estados Unidos disparó misiles Tomahawk desde un submarino contra la ciudad de Isfahán.
El jefe del Estado Mayor Conjunto, general Dan Caine, enfatizó que esta fue la operación de bombardeo con B-2 más grande en la historia de Estados Unidos, además de ser la misión más prolongada con este tipo de aeronaves desde los ataques del 11 de septiembre de 2001.
Cronología de la operación
La compleja operación se inició en la noche del viernes y se extendió durante el sábado, hora de Washington. Los bombarderos despegaron desde la base de Whiteman, en Misuri. Parte de la flota se dirigió hacia Guam, en el Pacífico, actuando como señuelo, mientras el resto se dirigía sigilosamente hacia el este en un vuelo que duró aproximadamente 18 horas.
- 17:00 (18:00 de Argentina): Un submarino estadounidense lanzó más de dos docenas de misiles de crucero contra las instalaciones nucleares de Isfahán, coincidiendo con la llegada de las aeronaves a espacio aéreo iraní.
- 18:40 (19:40 de Argentina): Los B-2 arrojaron dos bombas pesadas GBU-57 sobre el sitio nuclear de Fordó.
- Posteriormente: Se sucedieron el resto de los ataques, alcanzando los últimos objetivos a las 19:05 (20:05 en Argentina).
Las fuerzas estadounidenses regresaron a sus bases sin sufrir bajas ni recibir fuego enemigo. "Los cazas iraníes no despegaron y parece que sus sistemas de misiles tierra-aire no detectaron nuestra presencia", señaló el general Caine, destacando la efectividad de la operación.
El presidente Trump supervisó el desarrollo de "Midnight Hammer" desde la sala de crisis de la Casa Blanca, a la que llegó en la tarde del sábado tras pasar el día en su campo de golf de Nueva Jersey.
Indetectable y con fines quirúrgicos
La planificación de la operación se extendió por semanas y meses, incluso mientras se mantenían conversaciones diplomáticas con Teherán sobre su programa nuclear. "Debíamos estar preparados para cuando el presidente hiciera la llamada", indicó Hegseth.
La misión fue catalogada como altamente clasificada, con muy pocas personas en Washington conociendo su momento o naturaleza, añadió Caine. El secretario de Defensa recalcó que se trató de un ataque quirúrgico contra el programa nuclear iraní, diseñado para no afectar a tropas ni a civiles.
"Esta misión no buscaba un cambio de régimen. El presidente autorizó una operación de precisión para neutralizar las amenazas a nuestros intereses nacionales que representa el programa nuclear iraní y para defender a nuestras tropas y a nuestro aliado, Israel", puntualizó Hegseth.
En un mensaje a la nación el sábado por la noche, Trump instó a la República Islámica a elegir entre "la paz o una tragedia más grande que la que han visto en los últimos ocho días".