Se cumplen tres meses desde la detención del gendarme catamarqueño Nahuel Gallo en Venezuela, y su familia finalmente ha logrado confirmar su paradero: se encuentra en la prisión de El Rodeo, ubicada a una hora de Caracas. Sin embargo, esta información no llegó por canales oficiales, sino a través de un ciudadano estadounidense que estuvo recluido en el mismo penal y que fue liberado recientemente.
Desde su arresto el 8 de diciembre de 2023, Gallo no ha tenido contacto con su familia ni con representantes legales. No se le ha abierto una causa judicial ni figura en registros de tribunales venezolanos. Su caso forma parte de un grupo de 120 extranjeros de 17 nacionalidades acusados por el gobierno de Nicolás Maduro de conspirar contra el régimen.
El presidente venezolano lo señaló públicamente el 6 de enero, acusándolo de haber planeado el asesinato de la vicepresidenta Delcy Rodríguez. En respuesta, el gobierno argentino de Javier Milei negó categóricamente la acusación y exigió su inmediata liberación.
Un arresto sin pruebas y una familia sin respuestas
La pareja de Gallo, la venezolana María Alexandra Gómez, ha denunciado la falta de información oficial sobre su situación. Según su testimonio, a los extranjeros detenidos en Venezuela se les asigna un defensor público al comparecer ante un tribunal, pero Gallo ni siquiera ha tenido acceso a este derecho.
La familia ha realizado gestiones legales para esclarecer su paradero, incluyendo la presentación de una denuncia por desaparición forzada a través de abogados. No obstante, hasta ahora, el gobierno venezolano no ha dado respuesta sobre su estatus procesal.
Gómez, quien se encuentra en Caracas junto a su hijo de dos años, ha manifestado su intención de recurrir a todas las instancias posibles para lograr la liberación de su pareja. "Voy a empezar a acudir a lo humano. Lo legalmente correcto ya se hizo. Tocaré todas las puertas para rogar por la liberación de Nahuel", afirmó.
El papel del gobierno argentino en la negociación
La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, aseguró que se están llevando a cabo gestiones diplomáticas para lograr el retorno de Gallo al país. "Tenemos algunas líneas con países aliados, pero no queremos revelar detalles para protegerlo", declaró.
Sin embargo, la familia del gendarme ha expresado su frustración ante la falta de información sobre los avances en el caso. Su hermano, Kevin Gallo, indicó que si bien la ministra los contactó en una ocasión, desde entonces han sido derivados a su secretaria sin recibir respuestas concretas.
Esta falta de claridad ha generado incertidumbre y preocupación entre sus allegados, quienes esperan que el gobierno argentino intensifique sus esfuerzos para lograr su liberación.
El arresto de Nahuel Gallo en Venezuela ha generado una profunda preocupación tanto en su familia como en el gobierno argentino. La ausencia de un proceso judicial transparente y la falta de comunicación oficial sobre su situación han alimentado la incertidumbre en torno a su detención.
Mientras las negociaciones diplomáticas continúan, su familia sigue exigiendo respuestas y apelando a instancias internacionales para lograr su pronta liberación. La comunidad internacional también observa de cerca este caso, que pone en evidencia la difícil situación de los detenidos extranjeros en Venezuela.
