Este miércoles, dio inicio en la Cámara Penal N° 1 el homicidio de Miguel Ángel Apaza, hecho ocurrido en el norte de la Capital en octubre del año 2015 y por el cual José Daniel Gordillo, Pio Javier Gordillo, Cristian Nicolás Gausto, Ramón Eduardo Soria, Cristian Espinoza, Ever Luis Santos, Braian Saúl Juárez y Juan Carlos Encinas, ocupan el banquillo de los acusados. 

Con un fuerte dispositivo policial en las afueras del edificio judicial, pasadas las 9.30 de la mañana, el tribunal integrado por los jueces Fernando Esteban, Mauricio Navarro Foressi y Miguel Ángel Lozano abrió la audiencia. En primer término, se le intimó a todos y cada uno de los acusados del hecho por el que debían responder ante la justicia. Cabe señalar que los delitos que enfrentan son el de homicidio doblemente calificado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas en calidad de autor, en el caso de los cuatro primeros mencionados; mientras que, los dos siguientes, comparten idéntica imputación solo que en carácter de partícipe necesario y los dos últimos de la lista, Juárez y Encinas, por los delitos de encubrimiento por favorecimiento personal calificado por tratarse de un delito especialmente grave en calidad de autor y encubrimiento por receptación agravado por ánimo de luchar en calidad de autor, respectivamente.

Tras hacerle conocer las acusaciones, es decir, el acto desarrollado por cada uno de ellos según la fiscalía, que desencadenaron en el asesinato de Miguel Angel Apaza, en lo que seria un ajuste de cuentas por el robo de la moto de la hermana de los imputados Gordillo, el tribunal le dio la palabra a los imputados para que contaran su versión del hecho.

Nicolás Gausto declaró y dijo que está de “arriba” en el caso, que no cometió el crimen y que ni siquiera conoce a los principales imputados a quienes solo los conoce de vista. Luego fue el turno de Cristian Espinoza cuyo abogado defensor solicitó que el resto de los imputados salieran de la sala para que su asistido pudiera expresarse libremente. Está postura fue compartida por el tribunal y los otros siete imputados se retiraron a una sala contigua custodiados por el personal del penal.

Seguidamente, Espinoza declaró por varios minutos y respondió a las preguntas de la fiscalía. En el inicio de su relato, el imputado dijo conocer a Javier Pio Gordillo quien en otra oportunidad lo había buscado también para poder recuperar la moto que le habían robado a un amigo. Al parecer, Espinoza era una especie de intermediario entre el que robaba la moto y el propietario del rodado con quien acordaba el pago del rescate y la devolución de esta.

Según aseguró, aquella noche del hecho supuso que iba a ser lo mismo. Gordillo lo llamó y le preguntó  por la moto que le habían robado a su hermana y Espinoza les hizo de contacto para recuperarla. Sin embargo, según declaró, cuando los Gordillos llegaron a buscarlo, notó "algo raro". “La actitud de ellos era diferente. Me presionaron para que les dijera quien tenía la moto. Javier hacía ademán con sus manos, como si tuviera un arma y se los dije tenía miedo. Sino les decía que era Apaza quien tenía la moto esa noche a quien iban a matar era a mí”, declaró.

Continuando: “Después de que les dije me llevaron con ellos. Andaban en dos motos los hermanos Gordillo, Gautos y Soria. Fuimos a la casa de "Kity" Gordillo y allí vi cuando Javier ingresó a la casa y salió acomodándose de la cintura. Para mí traía otra arma aunque no la vi", precisó el imputado ante las preguntas de la fiscalía.

También dijo que fue en ese momento cuando decidió irse y no acompañar a los cuatro imputados arriba nombrados, enterándose al día siguiente por su hermano, quien trabajaba en el taller de otro de los imputados, Ever Santos, que esa noche habían ultimado a Apaza.

En síntesis, Espinoza  trató de explicarle al tribunal que su conducta por la que llega acusado como partícipe necesario -por haberle dicho a los Gordillo que Apaza era quien tenía la moto- no fue para colaborar en el crimen como lo acusa la fiscalía, sino por temor a que lo mataran.

En este sentido, responsabilizó a los hermanos Gordillo, a Gausto y al cuñado de estos de apellido Soria como quienes asesinaron a Apaza por el robo de la moto de "Kity". Concluido su testimonio, los otros seis imputados regresaron al recinto y el debate continuó.

Santos, al igual que José y Pío Gordillo, Ramón Soria y Braian Juárez, optó por no declarar y guardar silencio en el inicio del debate. Sin embargo, quien sí declaró fue Juan Carlos Encinas, quien llega al juicio cumpliendo una condena en el penal por delitos contra la propiedad. 

Básicamente, el imputado dijo: “reconozco el hecho del que se me acusa y no tengo nada que decir en relación al crimen de Apaza”.

Tras escuchar a todos los imputados, el tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo lunes a pedido de las defensas de los acusados quienes ya tenían previsto otras audiencias con antelación al inicio del debate.

El próximo lunes a las 9.00 de la mañana el juicio se reanudará y se iniciará con la ronda de testigos. Para la oportunidad, están citados cinco de ellos, propuestos por el ministerio público fiscal a cargo del Dr. Alejandro Dalla Lasta