En la continuidad del juicio oral y público que tiene en el banquillo de los acusados a Gonzalo Samuel Pacheco, por el supuesto delito de lesiones gravísimas culposas calificadas en calidad de autor, en la audiencia de hoy en el recinto del Juzgado Correccional N°3, se escuchó a cinco testigos.

El más importante fue, sin lugar a dudas, el testimonio de José Maximiliano Aybar, la víctima que, consecuencia del grave siniestro, sufrió la amputación de su brazo derecho.

Sentado ante el juez Javier Herrera, su amigo el imputado, el abogado defensor de este y el fiscal Víctor Figueroa, el testigo contó pormenores de lo ocurrido aquella madrugada del 28 de diciembre del año 2019, cuando junto a una tercera persona viajaban como acompañantes en el automóvil que conducía el imputado. También declaró el otro sobreviviente, el médico que operó a Aybar y el conductor de una camioneta, quien fue testigo circunstancial del siniestro.

Entre los relatos, se puede resaltar el del testigo que indicó que Pacheco, es decir, el imputado, ingresó de forma imprudente a la rotonda: “Venía fuerte, por eso, al ingresar a la rotonda, el auto se volcó”, indicó en la declaración.

Concluida la ronda de testigos de la segunda jornada, el juez pasó a un cuarto intermedio hasta hoy a las 8:30 para continuar escuchando a los demás testigos de la causa.

La causa

El grave siniestro vial sucedió el 28 de diciembre del año 2019 entre las cuatro y cuatro y treinta de la madrugada, cuando al ingresar a la rotonda de avenida México y Virgen del Valle, Pacheco perdió el control del auto y volcó, quedando con sus ruedas hacia arriba.

En la apertura del debate, el imputado guardó silencio.