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Crimen del Santa Marta

El hijo y el hermano del principal sospechoso se presentaron ante la Justicia y él guardó silencio

Se trata de Gastón y Gabriel Barrera, hijo y hermano de Walter Barrera, el principal sospechoso del disparo mortal a Sebastian Chanampa. Fue en la Comisaría de Sumalao. Ayer a la tarde, Walter fue indagado, pero se mantuvo en silencio.

02 Diciembre de 2020 00.51

En las primeras horas de la mañana de ayer, Gaston (20) y Gabriel Barrera (45), hijo y hermano, respectivamente de Walter Barrera, el principal sospechoso en el homicidio de Sebastián Chanampa se entregaron en la Comisaría de Sumalao, departamento Valle Viejo, luego de que tal como lo informara LA UNIÓN en su edición del martes, la fiscala Jesica Miranda, quien lleva adelante la investigación del homicidio emitiera una orden de detención para ambos.  
LA UNIÓN pudo conocer de voceros de la causa que los sospechosos, quienes habían sido sindicados por los testigos como las personas que acompañaban a Walter Barrera y a Gabriel Lazarte, el sábado pasado a la noche, cuando a bordo de un automóvil llegaron a la casa de Chanampa en el barrio Santa Marta y, tras una descomunal gresca con machetes y armas blancas, asesinaron a Sebastián de un disparo en el pecho.  
Acompañados por el excamarista Juan Pablo Morales, los sindicados se pusieron a disposición de la Justicia, desde donde se ordenó que ambos quedaran alojados en los calabozos de la dependencia. Ahora, se aguarda que la fiscala fije fecha para la audiencia de indagatoria, que podría llevarse a cabo en la jornada de hoy, o bien, mañana en la Fiscalía de calle Junín al 600. 

Indagatoria 
En tanto, en la tarde de ayer, Walter Barrera fue trasladado desde su lugar de detención, en la Comisaría de Sumalao, a la Fiscalía General, donde fue indagado por la Dra. Jesica Miranda. 
Acompañado por su abogado defensor, el Dr. Morales, el principal sospechoso del autor del disparo mortal se sentó ante la fiscala y escuchó las pruebas obrantes en la causa en su contra y luego, la imputación, homicidio agravado por el uso de armas. Seguidamente, la fiscala le dio la palabra para que ejerciera su derecho a la defensa, pero por recomendación de su abogado, optó por guardar silencio.  
Luego, fue el turno de Gabriel Lazarte, el otro detenido de la causa, quien contó con la asistencia legal del Dr. Pedro Justiano Vélez. Tras ser sometido al mismo acto procesal, el imputado tampoco declaró. Finalmente, la fiscala dispuso que ambos detenidos regresaran a su lugar de detención, donde continuarán privados de la libertad. Voceros de la causa indicaron que por la gravedad de la imputación que pesa contra los imputados, y teniendo en cuenta que se fugaron tras cometer el asesinato, la fiscala le solicitará al juez de Control de Garantías la audiencia de control de detención.  

Móvil y hecho 

En cuanto al móvil del crimen, tal como lo publicó en exclusiva el lunes LA UNIÓN, fue una apuesta perdida en una carrera clandestina de caballos de la que participaron la víctima y su victimario, el sábado, horas antes de la tragedia. Supuestamente, tras perder el caballo de Chanampa, este debía pagarle un dinero a Barrera, pero no sucedió. Ante el desorden en el stud, donde la víctima guardaba sus equinos, el encargado los corrió. Barrera se marchó, pero luego regresó en un auto junto a los otros tres detenidos a buscar a Chanampa, pero ya no lo encontró, por lo que se dirigió a su casa, hallándolo en la vereda, consumiendo bebidas junto a otros familiares. Los detenidos descendieron del rodado y atacaron a los Chanampa con cuchillos y machetes, pero en un determinado momento, Barrera, a una corta distancia, le apuntó en el pecho a Sebastián y jaló el gatillo. El joven cayó al suelo prácticamente sin vida. Luego, Barrera, su hijo y su hermano se marcharon en tanto que el “Tucumano” fue llevado al hospital ya que presentaba una lesión de arma blanca en el cuerpo, quedando internado con custodia policial. El domingo, cerca de las cinco de la madrugada, Barrera -quien sería puntero político en el barrio de la víctima- se presentó junto a su abogado en la Subcomisaría de Sumalao y quedó detenido.