Aun cuando resta una confirmación científica en cuanto a que los restos óseos hallados en el kilómetro 177 de la Ruta Provincial N° 46 serían de Eugenia Olivera (37), el resto de las pruebas, tanto documentales como testimoniales y científicas, que, hasta el momento, lograron recolectar los investigadores en el marco de la causa en la que se investiga la desaparición y muerte de Olivera, no dejan dudas.  

A la versión que supuestamente habría dado Eliseo Guerrero al quebrarse, el martes a la siesta, a los investigadores del lugar donde fueron hallados los restos óseos, un vecino de la localidad declaró que vio a Guerrero en compañía de Eugenia Olivera sobre una explanada, a metros de una especie de tranquera, que se ubica campo adentro. Situación que ubicaba en el lugar al detenido y a la víctima. 

Así también, el testigo recordó que, cuando vio a la pareja, divisó también a un costado de la ruta un automóvil Fiat Palio de color gris y un carro, vehículo que Guerrero solía alquilar a un vecino de Andalgalá. Tras confirmar que el detenido había alquilado dicho rodado, la policía procedió al secuestro de aquel para su posterior peritaje. Los investigadores buscarán hallar algún rastro que permita presumir que Eugenia estuvo en ese vehículo y que fue ultimada en el lugar del hallazgo. 

En paralelo a ello, la policía allanó el domicilio de los padres se Guerrero, de donde secuestraron una prenda de vestir con una mancha, supuestamente sangre, la que será en breve remitida al laboratorio forense para determinar si es sangre, si es humana, y a quién pertenece. También, del inmueble se secuestró un teléfono celular que sería propiedad de la madre del detenido. 

En cuanto a la presencia de los peritos en el lugar, ayer trabajaron varias horas recolectando los indicios y los restos óseos encontrados, los que serán enviados al laboratorio para determinar su ADN.  
Por otra parte, en cuanto a la situación procesal de Guerrero, fuentes judiciales indicaron que, próximamente, sería imputado e indagado posiblemente por femicidio y homicidio agravado por mediar una relación de pareja. 
 

Una multitud pidió justicia por Eugenia Olivera

Más de un centenar de andalgalences se autoconvocaron ayer a la tarde, enfrente al edificio de la comisaría local y manifestaron su descontento por la supuesta inacción que la Justicia y la Policía habrían tenido ante las denuncias de Eugenia Olivera. En el mes de febrero pasado, la víctima había denunciado a su pareja, hoy detenido, Eliseo Guerrero, por violencia de género. 
Bajo el lema “vivas nos queremos”, pasadas las 19.00 horas, los andalgalences se concentraron llevando algunos consigo una vela encendida. “Justicia” fue la palabra que más se escuchó en la manifestación que, por su magnitud, hizo que personal del Grupo Especial de Infantería, tanto masculino como femenino, de esta ciudad Capital, viajara ayer a la Perla del Oeste para custodiar la comisaría. 
Finalmente, luego de hacer escuchar su enojo y reclamo, los manifestantes se desconcentraron pacíficamente.