Pasado el mediodía, la Policía comisionada por el fiscal Jonathan Felzstyna para la búsqueda de Karina Chazarreta, quien falta en su hogar desde el pasado miercoles a la mañana, cuando salió caminando de su casa, previo a avisar que no iría a trabajar, concluyó con los allanamientos en los domicilios, tanto de Cristian del Valle Ortega (46) como de su expareja Karina Chazarreta (49).
De acuerdo con la información oficial a la que pudo acceder LA UNIÓN, los investigadores de la Policía, conjuntamente al personal de la Unidad de Violencia de Género y de la Unidad Judicial N°8 allanaron la casa N°9 del barrio 25 Viviendas Norte, lugar donde hasta el miércoles 11 de enero, Karina Chazarreta convivía junto a sus tres hijos, uno de ellos personal policial.
Por disposición judicial, los investigadores en el allanamiento secuestraron tres teléfonos celulares –los que serían propiedad de los hijos de Karina-, dos computadoras portátiles, cuadernos y papeles con anotaciones, el chip de un teléfono móvil y diferente documentación, entre tarjetas de crédito, tarjeta SUBE y una licencia de conducir, además, de una motocicleta Honda Wave 110cc., propiedad de Karina Chazarreta.
Todos estos elementos fueron luego trasladados con la correspondiente cadena de custodia al laboratorio de la Justicia para su posterior análisis.
Según trascendió, los investigadores esperan poder acceder a los móviles y a las computadoras secuestradas y buscar información que les permita saber qué hizo Karina antes de que desapareciera y cualquier otra información que pudiera ser útil en la causa.
En paralelo al allanamiento en la casa de Karina y sus hijos, los investigadores y el personal de la Unidad de Violencia de Género allanaron también la casa de la expareja de Karina, Cristian del Valle Ortega, quien permanece arrestado en la división investigaciones.
De acuerdo con lo informado, el procedimiento se concretó en la vivienda de calle Corrientes al 800, donde el sindicado convive con su grupo familiar.
Mientras tanto en la fiscalía se continúan recepcionando testimonios a diferentes personas que, de una u otra manera, tenían una relación con Karina, quien tal como lo publicó en exclusiva este diario, el día miércoles 11 de enero, antes de ser vista por última vez, pasadas las 6:30 de la mañana, llamó a su empleador y le dijo que no iría a trabajar. Luego de cortar la llamada, Karina salió caminando sola de su casa.
Una cámara de seguridad visualiza a la mujer desplazarse por la avenida San Juan Bautista, ubicada a metros de su domicilio, donde se la ve ingresar a un quiosco del que sale a los pocos minutos y continúa caminando hasta la avenida Los Terebintos. Desde ese punto, nada más se sabe sobre su paradero.