La investigación que llevaba adelante la fiscal Alejandra Antonino de la fiscalía de Violencia Familiar y de Genero, sumó ayer más fojas en el expediente.
Durante la mañana y parte de la siesta se desarrollaron en forma simultánea tres allanamientos de viviendas, uno de ellos en la casa del principal sospechoso y denunciado por dos de los hijos de Claudia, quienes lo acusan de haberla instigado a quitarse la vida, Luis Lobo, y los otros dos restantes allanamientos se realizaron en domicilios en los que el mencionado frecuentaba constantemente.
De acuerdo a la información a la que pudo acceder LA UNIÓN de fuentes vinculadas a la investigación, en los allanamientos ordenados por el juzgado de control de garantías y los que fueron materializados por el personal de ciberdelitos, los investigadores secuestraron varios teléfonos celulares, computadoras de escritorio y portátiles, como así también otros dispositivos electrónicos.
Todos estos serán en breve remitidos al laboratorio satelital para su análisis y verificación del contenido de los mismos. Trascendió, además, que la fiscalía busca reconstruir cuál fue la "actividad" de Luis Lobos los días previos al del suicidio de Claudia, 19 de septiembre del 2024, y también los días posteriores. Información que acumulada con el resto de la pruebas obrantes en el expediente -testimonios y pericias psicológicas y psiquiátricas- le permitirán a la justicia avanzar en el armado del rompecabezas y determinar con la pieza principal que será la autopsia psicológica, de la cual la familia prestó su conformidad, si la docente chacarera por quien sus familiares y amigos concretaron más de trece marchas en pedido de justicia aquel 19 de septiembre cuando decidió quitarse la vida en su casa en Valle Viejo, lo hizo por voluntad propia o fue instiga a quitarse la vida.