Los efectivos de la Policía de la Provincia, al igual que el personal de Salud, son los más expuestos en este rebrote de la pandemia por Covid-19, que afecta a todo el país y Catamarca no está exenta.
Si bien, casi en su totalidad, el personal policial recibió ya dosis de refuerzo, los contagios directos o por contactos estrechos han ocasionado, en esta primera semana del año, preocupantes "bajas" -si cabe el término- en las guardias de las comisarías y dependencias policiales, como así también en los grupos especiales y en los institutos policiales en cuanto al número de personal que dio positivo de Covid-19 o, bien, debió aislarse por un contacto estrecho, ya sea en el ámbito familiar o por haber compartido la guardia con un caso positivo.
En la Capital, por ejemplo, comisarías como la Seccional Séptima y Quinta fueron, de acuerdo a los datos que se conocieron, las más afectadas, llegando a quedar la jurisdicción solo con guardias mínimas.
También, el personal de cadetes que concurre a la Escuela de Oficiales de la institución se ve afectado. Versiones policiales daban cuenta de una importante cantidad de personal afectado -que, si bien no reviste aún la jerarquía policial, colaboran principalmente en el Operativo Sol y Montaña-, muchos de los cuales fueron aislados ya a principio de la semana.
En el interior también el virus está presente. Departamentos como Fray Mamerto Esquiú, Valle Viejo, Tinogasta, Belén, Santa María, Santa Rosa son en los que mayor reporte de policías positivos o aislados tuvieron, debiéndose, en algunos casos, sanitizar las instalaciones.
Si bien, el protocolo y las medidas sanitarias se activan inmediatamente y el sistema de burbuja vuelve a emplearse, los contagios superan a la policía, llegando, por ejemplo, en el caso de Santa María, puntualmente, haber dado positivo de Covid-19 los dos detenidos alojados en la dependencia.
Durante la jornada de ayer, fueron muchos los comentarios de efectivos de distintas jerarquías y jurisdicciones que hicieron llegar su preocupación, ante la situación sanitaria que afecta a toda la provincia. Una versión que supuestamente se escucha en los pasillos de la Jefatura de la Policía es la de la solicitud a las autoridades provinciales de mayores restricciones sociales.
