El Tribunal de la Cámara Penal N° 2 comenzó este lunes con el debate oral y público para determinar la responsabilidad penal de José Arnaldo Leiva, acusado de haber amenazado a su expareja y madre de sus dos hijas, menores de edad, a quien intentó asesinar al igual que a sus padres, hecho que tuvo lugar en el barrio San Antonio Oeste, el 14 de noviembre de 2019.

Leiva debe responder por los supuestos delitos de “amenazas simples”; “violación de domicilio”; “homicidio doblemente calificado por mediar una relación de pareja y por femicidio en grado de tentativa”; “homicidio simple en grado de tentativa”, dos hechos, todo en concurso real y en calidad de autor. 

El debate inició a las 9 con los alegatos de apertura y algunas declaraciones de testigos.

El imputado se negó a prestar declaración indagatoria ante los jueces Luis Guillamondegui, Silvio Martoccia y Fabricio Gershani Quesada, por lo que en la sala se leyó su declaración en la que señaló que nunca fue su intención matar a nadie, aunque reconoció ir a la casa de los padres de la víctima y agredir a su ex y a los progenitores.

También afirmó en el escrito que dos meses antes del hecho su expareja le dijo que quería finalizar la relación de doce años y que la hija mayor, supuestamente, no era su hija. Luego ella se se mudó de la casa donde convivían al domicilio de sus padres donde finalmente ocurrió el hecho.

Tras la declaración de cuatro testigos, el Tribunal de Juicio pasó a un cuarto intermedio hasta el próximo miércoles a partir de las 9.

Los hechos

En cuanto a los graves hechos por los que llega a debate Leiva, ocurrieron el 14 de noviembre del año 2019, en horas de la tarde. Pasadas las 17.00 horas, su expareja, la víctima, R. M., recibió un llamado telefónico del imputado, quien la amenazó con ir a buscar una herramienta y dirigirse a la casa de sus padres, en el barrio San Antonio Sur, en donde, luego de romper la puerta, ingresaría y la mataría. 

Casi una hora después, Leiva cumplió con su amenaza y se presentó a bordo de una motocicleta en la casa de los padres de su ex, en donde, utilizando una barreta de hierro con una punta achatada, abrió la puerta -haciendo palanca- e ingresó a la vivienda. 

En el interior estaban los padres de la víctima, la mujer y sus dos pequeñas niñas, observando a su expareja en el pasillo de la cocina, a quien atacó con furia. El resto de la familia logró escapar y pedir ayuda.