Horas antes de una nueva audiencia en el juicio por la denominada Causa Cuadernos, Cristina Fernández de Kirchner publicó un mensaje en su cuenta oficial de X en el que volvió a cuestionar la validez del expediente y acusó a la Justicia federal de sostener un proceso "sin Estado de derecho". La expresidenta, que cumple prisión con el beneficio de arresto domiciliario, reforzó sus críticas contra las pruebas centrales de la investigación y contra los funcionarios judiciales involucrados.
En su publicación, la exmandataria afirmó que "todo lo que advertimos sobre las barbaridades, mentiras y falsificaciones perpetradas en estas causas de opereta judicial se termina demostrando que es cierto... una por una". Con su característico uso de ironía, comparó el desarrollo del caso con "esas series malas en las que ya sabés el final desde el primer capítulo, pero igual te sorprende lo burdo del guion".
La nueva ofensiva sobre los cuadernos
Cristina Kirchner dedicó gran parte del mensaje a insistir en que las pericias oficiales habrían confirmado que los cuadernos utilizados como prueba clave "no fueron escritos, sino fabricados". Según la marcha de la investigación mencionada en su posteo, el juez federal Marcelo Martínez de Giorgi volvió a procesar días atrás al exsargento de la Policía Federal Jorge Bacigalupo, quien fue señalado como la persona que entregó los cuadernos.
De acuerdo con la exmandataria, el procesamiento ratifica que los textos habrían sido "adulterados" y "reescritos", un punto que su defensa plantea desde hace años para intentar desacreditar el origen de la causa. "Como siempre dijimos, son truchos", sostuvo.
Cristina Kirchner también retomó la participación de actores externos a la causa original. Citó la versión publicada por el diario La Nación, en la cual Bacigalupo habría sido quien entregó los cuadernos al periodista Diego Cabot, empleado del mismo medio, quien luego los puso en manos del fiscal Carlos Stornelli. "¡Un escándalo!", expresó la expresidenta, reforzando la idea de irregularidades mediático-judiciales en el inicio del expediente.
Críticas al accionar judicial
La exjefa de Estado volvió a involucrar directamente a Stornelli y al fallecido juez Claudio Bonadio, a quienes atribuyó "extorsiones, amenazas y torturas" en el marco del caso. En su publicación, planteó una pregunta retórica: "¿Alguien puede explicar seriamente que esta causa siga en pie cuando está probado que los cuadernos que la originaron fueron adulterados, reescritos, dictados y tienen distintos tipos de escritura?".
La frase apuntó a instalar la idea de que la continuidad del juicio carecería de sustento jurídico, una postura que Cristina Kirchner sostiene desde el comienzo del expediente y que forma parte de su estrategia discursiva ante cada avance procesal.
Cruce político y referencia económica
Hacia el final del mensaje, la expresidenta vinculó su crítica judicial con la coyuntura económica del país. Afirmó que "en la Argentina no hay Estado de derecho" y utilizó un ejemplo de consumo para ilustrar lo que, según ella, es un deterioro social y económico.
Recordó que, según estadísticas de compras online del reciente Cyber Monday, el papel higiénico fue el producto más vendido en la plataforma Mercado Libre. "Sí, así como lo leés... Puesto número uno", enfatizó.
A modo de contraste, comparó la situación con 2015: "Pensar que a esta altura del año los argentinos compraban equipos de aire acondicionado o planificaban sus vacaciones". Y cerró su mensaje con ironía: "Lo dicho: si no hay pan, que haya circo... o papel higiénico".
Con este nuevo pronunciamiento, Cristina Kirchner vuelve a polarizar la agenda pública y judicial en la previa de una audiencia clave en el juicio que marcó uno de los capítulos más controvertidos de su trayectoria política.