El Senado de la Nación convirtió en ley el Presupuesto 2026 y lo girará al Poder Ejecutivo para su promulgación. Se trata del primer ejercicio fiscal del presidente Javier Milei aprobado por el Congreso y su sanción marca un hito político para el oficialismo, con implicancias directas para las provincias, entre ellas Catamarca, que siguen de cerca el impacto del nuevo esquema de gastos y recortes.

La votación en general resultó favorable por 46 votos a favor, 25 en contra y una abstención. En tanto, el capítulo II —el más sensible del proyecto— fue aprobado con 42 votos afirmativos, 28 negativos y las abstenciones de las senadoras Alejandra Vigo, de Provincias Unidas, y Julieta Corroza, de la Neuquinidad.

La iniciativa contempla gastos totales por 148 billones de pesos, con un superávit primario proyectado del 1,2% del Producto Bruto Interno (PBI). Además, prevé una inflación anual del 10,1%, un dólar a 1.423 pesos para diciembre de 2026 y un crecimiento económico del 5%.

Desde el plano político, la aprobación significó un triunfo clave para la senadora Patricia Bullrich, quien diseñó la estrategia parlamentaria desde su oficina en el primer piso del Senado. Allí funcionó la base de operaciones del oficialismo libertario, con un intenso movimiento de funcionarios y negociaciones con legisladores de fuerzas dialoguistas. El esquema contó con el acompañamiento del ministro del Interior, Diego Santilli; del presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem; y del subsecretario de la Presidencia, Eduardo "Lule" Menem.

Los votos del oficialismo

A los 21 senadores libertarios, incluido el cordobés Luis Juez con su bloque Frente Cívico, se sumaron los votos de la Unión Cívica Radical. Sin embargo, tres radicales rechazaron el capítulo II. También votaron de manera diferenciada legisladores del Frente Renovador de la Concordia de Misiones, de la Neuquinidad, de Despierta Chubut, del PRO, de Provincias Unidas y los cinco integrantes de Convicción Federal, lo que evidenció una fractura en el bloque peronista, aunque acotada al rechazo de ese capítulo.

La senadora Flavia Royón, de Primero los Salteños, acompañó la ley en general, pero votó en contra del capítulo II vinculado a la derogación de artículos relacionados con fondos para educación, cultura y defensa.

El debate

La defensa del proyecto estuvo a cargo de Ezequiel Atauche, presidente de la Comisión de Presupuesto. "Este es un punto de quiebre para nuestra historia: no vamos a gastar más de lo que nos ingresa", sostuvo, y aseguró que el objetivo es ordenar las cuentas públicas y atender a los sectores más vulnerables.

Desde Unión por la Patria, las críticas fueron encabezadas por Jorge Capitanich y Daniel Bensusán, quienes advirtieron que el Presupuesto reduce partidas clave para el desarrollo de políticas públicas en el territorio, afectando a provincias y municipios, una preocupación compartida por distritos del interior como Catamarca.

Por su parte, el senador radical Maximiliano Abad acompañó el proyecto en general, pero rechazó el capítulo II. "Un Presupuesto aprobado es indispensable para el funcionamiento de la República", afirmó, aunque cuestionó el ajuste en educación, ciencia y defensa, al advertir sobre la caída de la inversión en ciencia al 0,149% del PBI.

El radicalismo votó dividido: la mayoría del bloque acompañó, pero Abad, Flavio Fama y Daniel Kroneberger lo hicieron en contra en la votación en particular.

Cruces y tensiones en el recinto

La sesión estuvo atravesada por fuertes cruces políticos. El senador José Mayans, de UxP, cuestionó duramente a Patricia Bullrich y a la vicepresidenta Victoria Villarruel por la organización de las comisiones. A su vez, la senadora Cristina López denunció agresiones al intentar ocupar un despacho, lo que derivó en un tenso intercambio con legisladoras del PRO, en uno de los momentos más ásperos del debate.

La postura de UxP y la respuesta oficialista

Mayans rechazó el Presupuesto y denunció irregularidades reglamentarias en el tratamiento del proyecto. "Este presupuesto es nefasto para el país y va a traer una caída muy fuerte en las provincias", afirmó.

Bullrich evitó confrontar y permitió los planteos opositores, aunque pidió avanzar con la votación de los planes de labor parlamentaria, que fueron aprobados por 39 votos contra 33, anticipando la sanción final del Presupuesto. "El Presupuesto es una herramienta institucional muy importante para el país", sostuvo al ingresar al recinto.

Antes del debate central, juró como senador nacional por Río Negro Enzo Fullone, en reemplazo de Lorena Villaverde, cuyo pliego no fue avalado por la Comisión de Asuntos Constitucionales.