Elisa Carrió reiteró que fue espiada durante el gobierno de Cambiemos
"Sufrí mucha persecución, pero nunca tanta como parte de sectores de mi propio gobierno", denunció la líder de la Coalición Cívica y apuntó con nombre y apellido al excanciller Jorge Faurie.

La líder de la Coalición Cívica, "Me preparé todo este tiempo para estar plantada. Una madre llora cuando se muere un hijo, pero al otro día tiene que levantarse. Me jubilé para que crezcan los diputados de la Coalición Cívica”, agregó Carrió.

Carrió también contó que habla "con muchos chicos de La Cámpora" y defendió de manera inesperada a Florencia Kirchner, hija de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. "Defiendo a la hija de la Cristina, porque es una víctima. Ella no pudo poner los dólares ahí. Tiene que tener una defensa autónoma", sostuvo., aseguró este sábado que se vienen momentos "peores al 2001" en el país y vaticinó: "Vivo el ahora, pero sé que chocamos".

"Lo que viene es terrible. Vienen momentos dramáticos, incluso peores que al 2001. Sé que va a haber hambre", aseguró Carrió en La Mesa de Mirtha Legrand. 

El espionaje en el gobierno de Cambiemos le produjo un daño irreparable a mi familia.#MESAZA @mirthalegrand

— Elisa Lilita Carrió (@elisacarrio) October 16, 2022 ">

Acusaciones de espionaje

En otro trato del programa, Carrió aseguró que sufrió persecución durante el Gobierno de Mauricio Macri. "Sufrí mucha persecución, pero nunca tanta como parte de sectores de mi propio gobierno", aseguró al referirse a las acusaciones de espionaje que recaen sobre la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante el mandato de Macri.

"El daño que le hicieron a mi familia fue irreparable", aseguró Carrió, quien apuntó contra el segundo ministro de Relaciones Exteriores de Macri: “El canciller Faurie fue parte de eso".

Luego la dirigente aprovechó para reiterar la posición de la Coalición Cívica sobre la inteligencia en el país. “Somos los únicos que pedimos la eliminación de la AFI”, enfatizó. Sin embargo, señaló que, para que eso ocurra, la persona que se siente en la Casa Rosa tiene que llegar “sin una valija detrás”.