El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, dio un nuevo paso en su construcción política a nivel nacional al formalizar una alianza con la senadora Beatriz Ávila —ex integrante del PRO— que le permitirá contar con un monobloque propio en la Cámara Alta. El acuerdo, anunciado públicamente, marca un reacomodamiento relevante en un escenario legislativo atravesado por tensiones, alineamientos y negociaciones en torno a la gobernabilidad del gobierno de Javier Milei.
La legisladora, quien ya integraba un bloque unipersonal denominado Justicia Social, confirmó que rebautizó su espacio como Independencia, en línea con la denominación que Jaldo ya utiliza para su bancada de tres diputados en la Cámara Baja. El entendimiento consolida así una estructura política propia del mandatario tucumano en ambas Cámaras del Congreso.
Desde Casa de Gobierno, Jaldo celebró el anuncio y destacó el trabajo que viene realizando junto a Ávila desde hace meses. "Quiero agradecerle públicamente la decisión de formar, por primera vez, el Bloque Independencia en el Senado. Este paso viene a formalizar lo que ya veníamos construyendo juntos", expresó. Además, valoró el rol de la senadora por su aporte en "materializar leyes necesarias" y en la gestión de temas clave para Tucumán ante el Gobierno nacional.
Ávila, por su parte, explicó que la alianza responde a la necesidad de fortalecer la interlocución federal en un momento de alta complejidad institucional y económica. "Esto es clave para destrabar o agilizar gestiones a nivel nacional. Tiene repercusión directa en la vida de los tucumanos. Coincidimos en mantener el equilibrio fiscal, hacer el ajuste necesario pero con la gente adentro. Este es el modelo de Tucumán que priorizamos", afirmó.
El nuevo bloque aparece en un contexto donde Jaldo se consolidó como el primer gobernador peronista en alinearse con Javier Milei. La ruptura del bloque de Unión por la Patria a principios de 2024 —cuando acompañó la Ley Bases— marcó el inicio de una estrategia diferenciada dentro del peronismo, que generó tensiones internas pero le dio al mandatario un lugar destacado en el esquema de diálogo con la Casa Rosada.
En un año electoral, el gobernador reforzó su peso político interno en Tucumán y, tras el triunfo libertario, ratificó que mantendrá una fuerza propia en el Congreso. Además, participó de reuniones con otros mandatarios —entre ellos Gustavo Sáenz, de Salta— para avanzar en un eventual interbloque federal dialoguista, iniciativa que por ahora no tuvo avances concretos, aunque sigue en agenda.
Quién es Beatriz Ávila
La senadora tucumana tiene un recorrido político marcado por rupturas, realineamientos y decisiones autónomas frente a su espacio de origen. Fue electa diputada nacional en 2017 por Juntos por el Cambio, pero abandonó el bloque en 2019 tras la derrota de Mauricio Macri. Ante las críticas del expresidente, que la acusó de "traición", Ávila respondió públicamente que la verdadera traición había sido "generar frustración en la esperanza de los argentinos".
En 2021, su esposo —el entonces intendente de San Miguel de Tucumán— fue candidato testimonial a senador por Juntos por el Cambio. No asumió y su reemplazante natural en la lista era la propia Ávila, quien desde entonces ocupa la banca que mantiene hasta 2027.
Aunque se desempeñó como aliada del PRO, mantuvo posiciones independientes en votaciones clave. Una de las más resonantes fue su acompañamiento al pliego del juez Ariel Lijo para la Corte Suprema, en contraste con el rechazo uniforme del bloque amarillo.
Con esta alianza con Jaldo, Ávila consolida un perfil propio dentro del Senado, mientras el gobernador tucumano afianza su estrategia de articulación política a nivel nacional con sello propio.