Patricia Bullrich presentó su renuncia formal como ministra de Seguridad luego de haber jurado como senadora el pasado viernes. El paso administrativo se completó mediante una carta dirigida al presidente Javier Milei, en la que agradeció la confianza y respaldó las reformas impulsadas por el Gobierno.

"Continuaré defendiendo los valores que compartimos y las reformas que el país necesita y usted lidera: instituciones fuertes, ley, orden y un país donde los argentinos de bien puedan vivir y progresar en libertad", expresó en la misiva. También destacó el trabajo del equipo que la acompañó "en cada operativo, cada decisión y cada batalla".

Bullrich asumirá su banca en la Cámara Alta el 10 de diciembre. En su lugar quedará Alejandra Monteoliva, actual secretaria de Seguridad. A ella le dedicó un mensaje de despedida en el que resaltó su trayectoria: "Si hay alguien capaz de continuar con la doctrina que hoy logró el orden del país, es ella. Su capacidad, experiencia y compromiso serán fundamentales para profundizar el camino que iniciamos".

Cruce con Villarruel en su debut como senadora

La renuncia de Bullrich llega tras su primera aparición en el recinto del Senado, donde protagonizó un cruce con la vicepresidenta Victoria Villarruel durante la sesión de jura.

La situación se generó cuando Bullrich intentó solicitar la palabra pese a que los bloques habían acordado evitar discursos políticos. La senadora tocó la pantalla de su banca creyendo que eso habilitaría el micrófono, pero no funcionó. Villarruel le explicó que no podía autorizarle la intervención.

Ante la imposibilidad de usar el sistema, Bullrich decidió hablar a viva voz y pidió que su discurso fuera tomado por escrito.

Finalizada la sesión, se acercó a Villarruel para reclamarle "sea pareja para todos", en referencia a que se había limitado el ingreso a tres invitados por senador, mientras —según dijo— algunos legisladores trajeron más acompañantes sin restricciones.