Policías autoconvocados, efectivos retirados y agentes del Servicio Penitenciario volvieron a la calle ante la falta de respuesta del Ejecutivo provincial. Para hacer visible otra vez el reclamo, se concentraron este miércoles en el Parque de los Niños para exigir mejoras salariales y el pago de un ítem que —según denunciaron— no está siendo abonado por el Estado. En medio de la asamblea, se hizo presente el jefe de Policía, Marcos Herrera, quien buscó calmar los ánimos y propuso avanzar con un pedido conjunto ante las autoridades provinciales.
"Yo no quiero venir a imponerles algo, solo quiero que nos sentemos a conversar", expresó Herrera frente al grupo de manifestantes. El funcionario aseguró que su intención es gestionar una reunión con las autoridades competentes, y pidió una "cuota de confianza" para unificar el reclamo de todas las fuerzas.
"Nosotros, como Jefatura de Policía, estamos trabajando para todo el personal. Para mí no hay retirados, todos somos policías", agregó el jefe policial en un intento por cerrar la brecha entre los distintos sectores de la fuerza.
Durante el intercambio, varios autoconvocados tomaron la palabra para manifestar su descontento con las condiciones salariales actuales y con la falta de consenso dentro de la propia fuerza. Uno de los asistentes señaló: "Hay otros sectores que no están de acuerdo con la medida. Nosotros estamos haciendo algo mejor que ellos. Nos arriesgamos y nos hacemos escuchar".
Los reclamos incluyeron también el pedido de una respuesta inmediata. "No venimos a pedir un bolsón. Estamos exigiendo nuestro salario. Hoy queremos irnos con una respuesta clara", planteó otro manifestante, a lo que se sumó un llamado a no "dilatar más la situación".
Frente a esto, Herrera se comprometió a iniciar gestiones con el ministro de Seguridad, Rubén Monguillot, aunque aclaró que su promesa, por ahora, es la de habilitar el diálogo más que garantizar una solución inmediata.
Finalmente, los autoconvocados aceptaron la propuesta de reunirse en la Sala de Situación de la Policía para consensuar una posición común. Ese documento será el que, posteriormente, el jefe policial elevará ante las autoridades del Ejecutivo provincial.