Con un discurso centrado en el federalismo y la cooperación política, Diego Santilli asumió oficialmente como ministro del Interior del gobierno nacional. Apenas minutos después de prestar juramento, el funcionario adelantó que su gestión tendrá como prioridad la construcción de una agenda común con los gobernadores, entre ellos los mandatarios de las provincias del norte, como Catamarca, que adhirieron al Pacto de Mayo.
"Vamos a tener una agenda común con los gobernadores. Hay 20 mandatarios que son los que firmaron el Pacto de Mayo y lo antes posible voy a reunirme con cada uno de ellos", afirmó Santilli, al trazar las primeras líneas de trabajo de su administración. La declaración, breve pero contundente, marcó el tono político con el que buscará encarar su nueva función: restituir canales de diálogo entre la Casa Rosada y las provincias, en un contexto de fuertes desafíos económicos y sociales.
El nuevo ministro llega al Palacio de Hacienda con la tarea de sostener las reformas estructurales impulsadas por el presidente. "Vengo a trabajar para sostener las reformas que lleva adelante el Presidente", subrayó Santilli, en alusión a los cambios en materia económica, laboral y fiscal que el Gobierno considera claves para la recuperación del país.
Su designación fue interpretada por distintos analistas como un gesto de apertura al diálogo federal, luego de meses de tensiones entre la Nación y varios distritos del interior. El Ministerio del Interior, históricamente vinculado a la articulación política con las provincias, se convierte así en un espacio clave para reconstruir consensos y asegurar la implementación de las políticas nacionales en todo el territorio.
En este sentido, la referencia al Pacto de Mayo no fue casual. Ese acuerdo, firmado por 20 gobernadores, busca consolidar una agenda de compromisos comunes entre el Gobierno central y las provincias, con eje en la estabilidad macroeconómica, la reducción del gasto público y el fortalecimiento institucional. Catamarca, junto con otras provincias del norte, se encuentra entre las jurisdicciones que respaldaron el documento y mantienen una relación institucional activa con el Ejecutivo.
Desde el entorno del nuevo ministro se anticipa que una de las primeras acciones de su gestión será iniciar una ronda de encuentros bilaterales con los mandatarios provinciales. El objetivo será revisar la situación particular de cada distrito, discutir temas de coparticipación, obra pública y desarrollo regional, y garantizar la continuidad de los programas acordados bajo el Pacto de Mayo.
Para Catamarca, se espera que estos encuentros sirvan para reafirmar la cooperación con la Nación en áreas clave, especialmente en materia de infraestructura, minería y empleo, sectores donde la provincia tiene un rol estratégico.
La asunción de Santilli representa, así, un nuevo capítulo en la relación entre el Gobierno nacional y las provincias, con la promesa de retomar un diálogo más fluido y coordinado. Su desafío será convertir esas palabras iniciales en resultados concretos que refuercen la presencia del Estado en todo el país.