Velardez Vaca repudio los detractores de Hebe Bonafini tras su fallecimiento: "La muerte de nadie es motivo de alegría"

“Se han escuchado lamentablemente voces, mensajes odio y revanchismo con este fallecimiento. La muerte no se festeja nunca, no debe ser motivo de alegría de nadie, sea quien sea quien haya fallecido.” sostuvo Hernán Velardez Vaca, Director de Derechos Humanos, en diálogo con LA UNIÓN en relación a las repercusiones del fallecimiento de Hebe de Bonafini, ex presidenta de Asociación Madres de Plaza de Mayo cuya figura ha recibido, nuevamente, fuertes reproches por sus polémicas declaraciones a lo largo de estos últimos años.

“Seguramente hay cuestiones que no han gustado sobre su forma de proceder, me arriesgo a decir. su polémica manera de manejarse, pero ha sido justamente alguien que ha impulsado sobre todo la memoria, la verdad, la justicia. Si no hubiera tenido esa fuerza, seguramente los resultados que se han ido logrando, habrían sido distintos. Así que más allá de lo que se le pueda reprochar, creo que es mucho más el legado, es mucho más importante lo que ha dejado.” sostuvo Velardez Vaca quien además manifestó que “la lucha continúa” a pesar de quienes se señalan como “detractores y negacionistas” sobre los crímenes de lesa humanidad durante la última Dictadura en Argentina.

En este sentido, el Director de Derechos Humanos repudió los discursos de odio. 

“El año que viene cumpliremos 40 años de la llegada de la Democracia y eso creo hace que tengamos que ser conscientes y tener coherencia, y que los discursos que se dan a favor o en contra sean debidamente fundamentados. Hay que prestar atención a las generaciones jóvenes. Si bien hay personas que siguen impulsando estos discursos de odio, negacionistas, es justamente no basado en la ignorancia. Son personas que ya tienen sus años vividos, y surge de una idea de la intensión aviesa de volver a instalar estas cuestiones de la violencia y el odio.” sostuvo.

Por último, hizo un llamado a las últimas generaciones de “llegar a sus propias conclusiones” y defendió “los datos crudos” sobre los desaparecidos, y repudió el discurso que sostiene que hubo “un revanchismo” o “una cacería de brujas” en relación a los juicios llevados a cabo contra los agentes que participaron de aquella última dictadura militar en el país.