El uso de media cebolla cruda como herramienta de limpieza se volvió un recurso frecuente en los hogares, especialmente en provincias como Catamarca donde se buscan alternativas económicas y sin agentes químicos. Su efectividad se basa en compuestos naturales que ayudan a eliminar residuos y desinfectar superficies.
Uno de los principales beneficios es su capacidad para desprender grasa y suciedad adherida, lo que la convierte en una opción útil para rejillas de cocina o ventilación. Además, sus compuestos sulfurados neutralizan malos olores producidos por bacterias y reducen la carga microbiana en superficies difíciles de alcanzar.
La cebolla también actúa como antifúngico, evitando la formación de moho en ambientes húmedos. Todo esto sin necesidad de productos agresivos y con un costo mínimo, ya que basta con cortar una cebolla a la mitad.
Cómo aplicar el método paso a paso
- Cortar una cebolla a la mitad.
- Limpiar superficialmente la rejilla para quitar polvo o residuos grandes.
- Frotar la cebolla directamente sobre la superficie, presionando para liberar el jugo.
- Dejar actuar al menos 10 minutos.
- Pasar un cepillo o esponja para retirar la suciedad aflojada.
- Enjuagar con agua caliente o secar con un paño limpio.
- Repetir el proceso una vez por semana si el área es muy húmeda.