El omelette es una de las recetas más clásicas y versátiles del mundo. Preparado a base de huevos batidos y cocidos a fuego suave hasta lograr una textura tierna y esponjosa, se convirtió en un plato ideal tanto para el desayuno como para una comida ligera. Además, es una opción saludable y fácil de preparar, muy presente en los hogares catamarqueños por su practicidad y valor nutricional.
Aunque muchos asocian su origen con Francia, la llamada "tortilla francesa" tiene una historia mucho más antigua. Existen registros que la vinculan con el Imperio Persa, el Imperio Romano y la España medieval.
Según un artículo del Centro de Salud Nutricional, el término "a la francesa" podría tener dos orígenes posibles. Una de las versiones señala que surgió durante la Guerra de la Independencia Española (1808-1814), cuando la escasez de alimentos llevó a los españoles a preparar una tortilla sin papas, conocida popularmente como "tortilla de cuando los franceses".
Otra teoría atribuye el nombre al médico escocés Alexander Hunter (1729-1809), quien publicó en Inglaterra el libro Culina famulatrix medicinae, donde incluyó la receta "A French Omelette". Esa obra habría contribuido a popularizar el nombre a fines del siglo XVIII.
Una receta sencilla y nutritiva
El huevo, ingrediente principal del omelette, es considerado uno de los alimentos más completos por su aporte de proteínas, vitaminas, minerales y grasas saludables. Su consumo favorece el desarrollo muscular y brinda energía, por lo que resulta ideal en dietas equilibradas.
Ingredientes:
2 huevos de campo
Manteca o aceite de oliva
Sal y pimienta
Hierbas frescas o secas: perejil, orégano, ajo deshidratado (opcionales)
A la mezcla básica se le pueden sumar otros ingredientes al gusto, como tomates cherry, jamón, queso o panceta, logrando versiones más completas y sabrosas.
Paso a paso para un omelette perfecto
Colocar los huevos en un bowl y condimentar con sal, pimienta y hierbas picadas. Se puede añadir un chorrito de leche, crema o agua para una textura más suave.
Calentar una sartén a fuego medio con un cubo de manteca o un poco de aceite de oliva.
Batir la mezcla hasta que quede homogénea y verterla en la sartén.
Cocinar a fuego bajo, moviendo suavemente la sartén en círculos para que los bordes comiencen a cuajar.
Raspar los bordes con una espátula y empujar hacia el centro hasta que la tortilla esté cocida pero aún jugosa.
Sencillo, rápido y adaptable a todos los gustos, el omelette es una receta que une historia, tradición y nutrición, manteniendo su vigencia en las mesas de todo el mundo.